El Málaga negocia un convenio con la RFAF para optimizar el campo de Cortijo Alto

Justo un año después de que el Málaga CF abandonara las instalaciones del Estadio de Atletismo Ciudad de Málaga para ahorrar costes y con las obras de Arraijanal reactivadas aunque aún lejanas para el uso y disfrute del primer equipo, el club estudia la posibilidad de que la primera plantilla emplee con mayor asiduidad a partir de la próxima pretemporada el Campo de la Federación Malagueña de Fútbol en Cortijo Alto. La entidad blanquiazul y la Federación Andaluza negocian un convenio para el uso y explotación de estas instalaciones, que cuentan con un valorado campo de césped natural que se ajusta a las medidas reglamentarias, algo que no ocurre con el del Anexo a La Rosaleda.

Según las fuentes de ambas partes consultadas, el acuerdo está avanzado aunque aún no se han rubricado los documentos, algo que puede ocurrir en los próximos días si no surgen contratiempos inesperados. Paralelamente a esas reuniones en las que ha tomado parte el delegado de la RFAF en Málaga, José González Carmona, y el administrador judicial del club, José María Muñoz, el club hace números, ya que de fructificar las conversaciones se deberían de acometer una serie de reformas con el fin de optimizar las instalaciones para la rutina de trabajo y entrenamientos de un equipo profesional en su día a día: mejora de vestuarios, y creación de nuevos espacios de trabajo como un gimnasio o una sala médica, entre otras obras.

Dicha inversión económica, así lo indican fuentes de la entidad blanquiazul, iría en consonancia al número de años que se acuerde en la concesión para que esta tenga rentabilidad antes de que el primer equipo pueda instalarse de manera definitiva en la futura Ciudad Deportiva. Cabe recordar que la ejecución parcial de la primera fase de Arraijanal, prevista para octubre, está más enfocada a la cantera y no se contempla todavía ningún campo de césped natural. En una época de reajuste de los recursos, el club quiere medir al detalle tal desembolso y analizar una posible explotación posterior.

Unas instalaciones conocidas

El campo de Cortijo Alto es una instalación de sobra conocida, pues el Málaga ya se entrenó allí durante gran parte de la pretemporada pasada y en ocasiones puntuales en el presente curso. Además, filial y Juvenil A suelen disputar en Cortijo Alto sus encuentros –el club, a cambio, se hacía cargo hasta ahora del mantenimiento del césped, y acometió en 2017 una serie de reformas para adecentarlas, mejorarlas, y dotarlas de una identidad corporativa. El Campo de la Federación Malagueña es además una instalación muy valorada por su ubicación en la periferia de la ciudad y muy bien comunicada.

Así, y toda vez que se cierre y firme el acuerdo –las relaciones entre ambas partes son muy buenas–, el Málaga podrá contar de pleno derecho con un nuevo e interesante espacio para el desarrollo de su actividad deportiva. La idea primigenia es que el primer equipo lo empleara algunos días a la semana por las mañanas, y la Escuela de Fútbol dependiente de la Fundación pudiera usarlo por las tardes, aunque es algo que se encuentra en fase de estudio y que se determinará con el paso de las semanas.