El Málaga quiere imitar al Eibar de 1999: una salvación que era más difícil todavía
Dicen que quien no conoce la historia está condenada a repetirla. Aunque a veces, de forma contradictoria, viene bien acudir al pasado para aprender de él e incluso emularlo. El Málaga se enfrenta este domingo a la Ponferradina en plena carrera por lograr lo casi imposible: hacer seis puntos más que sus dos rivales directos habiendo solo 12 puntos en juego. Algo que no parece tan complicado si se viaja a la temporada 1998/99.
Porque lo que sucedió en la zona alta de la Segunda División lo recordarán muchos malaguistas. Aquel año se certificó el regreso a Primera de un Málaga que quedó campeón de la división. Un ascenso inolvidable con Joaquín Peiró en el banquillo, con el pichichi Catanha (26 goles) y más jugadores ilustres como Roteta, Sandro, Movilla, Rufete o Basti. Pero por la parte baja de la clasificación hubo un milagro, el del Eibar y su salvación surrealista.
El Eibar llegaba a la jornada 39 a nueve puntos de la salvación. En ese momento estaba prácticamente desahuciado con 35 puntos y viendo al Logroñés, Mallorca 'B' y Leganés con 44 puntos, todos ellos marcando posiciones de permanencia. Restaban cuatro partidos y no dependían de sí mismos. Casi imposible.
La fórmula del milagro
No quedaba otra que ganarlo todo y esperar. Entonces, el conjunto eibarrés hizo una recta final sublime. Ganó los últimos cuatro partidos a Hércules (1-3), al Barça 'B' de Xavi, Puyol y Arnau (2-0), al Albacete (0-1) y al Toledo en la última jornada (3-0).
Sus partidos los contó por victorias, pero aun así tenían que esperar a que se dieran resultados externos. Milagrosamente, la suerte estuvo de su lado. Había en la última jornada un Logroñés-Leganés, duelo directísimo a quienes les era suficiente con empatar entre sí para salvarse. Ocurrió, insospechadamente (0-0). Lo inesperado le sucedería al Mallorca 'B', que recibía al descendido Hércules en su casa y acabó perdiendo 1-3. La salvación se hizo realidad.
El Málaga está a seis puntos a falta de cuatro jornadas. No a nueve, como el Eibar. Si gana los cuatro partidos que le queda tendría muy factible la permanencia, como le pasó al Eibar. Pero también si gana tres. Todo puede pasar en los últimos coletazos de esta edición de LaLiga Smartbank. Preparen los corazones y abrochen cinturones.
Lo que tenía que hacer el alcalde de Málaga es quitar la concesión del estadio al Málaga y a cualquier club que quisiera el estadio así los dueños de un club tendrían que tomarse al Málaga en serio y buscar financiación ellos solos.