Thiago, la falta de autocrítica y la prensa
Krasnodar (Rusia), 29 jun .- Thiago Alcántara se expresó con su lucidez habitual ante los micrófonos, tan alta como su calidad técnica de privilegiado del balón, pero en su impulso por pedir unión con la prensa como enlace con la afición, acabó desviando el tiro y mostrando falta de autocrítica del vestuario.
Trasladó Thiago a los medios de comunicación la responsabilidad de crear esa espiral de negatividad que acompaña tras ver desaparecer la brillantez en el juego de España en el Mundial 2018. El periodismo está lejos de las trincheras antiguas. El bien de la selección española va a la par que el suyo.
No existen pulsos abiertos con el seleccionador, como en la etapa tan tensa de Javier Clemente en la que acabó incluso habiendo una agresión física. No hay ninguna ausencia polémica de un jugador que genere debates, como Raúl con Luis Aragonés. La línea de respeto trazada con Vicente del Bosque se extendió con Julen Lopetegui y se mantiene intacta con Fernando Hierro. La única crítica que ha existido ha sido futbolística, justo la que siempre piden los jugadores.
La pérdida paulatina del derecho de informar de primera mano, en una continua tendencia del fútbol a encerrarse en su propio mundo, poco a poco se va adueñando también de la selección española. No ha cambiado el patrón ni el foco. España fue campeona del mundo y dos veces de Europa con un porcentaje altísimo de sus entrenamientos siempre abiertos. Ahora, entre el duelo ante Marruecos y el de octavos solo dejó ver quince minutos de calentamiento y se cerró la última sesión en Krasnodar antes del viaje a Moscú. Se da menos, pero se mantiene la misma línea de información de una gran cita.
El mal mundial de David de Gea, la falta de estabilidad defensiva, la poca producción de David Silva o plantear una suplencia de Andrés Iniesta para que desequilibre más en las segundas partes cuando entre en escena, han sido los debates futbolísticos de la prensa con un puñado de nombres como posibles cambios por partido. Nada que no represente el pensamiento de gran parte de la sociedad. Temas futbolísticos que han molestado al vestuario de la selección.
Abrió el fuego Jordi Alba, siguió con más tacto Dani Carvajal y con total claridad habló Thiago. "Siendo españoles tendríais que hacer algo de autocrítica también. Estáis todos lejos de casa, en teoría apoyando a España. Estamos todos aquí juntos para poder ganar. Si no ayudáis, hacéis que la opinión pública vaya a lo contrario a lo nuestro, es complicado que podamos hacer esto solos".
Se olvidó Thiago que la labor de la prensa no es animar con bufanda, que hay una parte de su trabajo que es la opinión como género periodístico y otra de análisis futbolístico que seguro deja conclusiones que en gran parte coinciden con las suyas y las del resto del vestuario. Los enemigos no están entre los periodistas, gremio maltratado en el que al final siempre recae la culpa.
España debe aumentar su nivel de autocrítica para mejorar, aprender de los errores cometidos, dar continuidad a lo poco bueno mostrado y volver a exhibir su gen ganador. Llega la hora de la verdad, el momento de demostrar que este grupo de futbolistas son animales competitivos. Ya es el todo o nada y el foco no puede desviarse del terreno de juego donde si vence la selección, todo el país gana.
