La Real Sociedad aguanta la aplicación del ERTE con un ojo en el desenlace de LaLiga
El escenario provocado por el coronavirus, sin precedentes, ha modificado la rutina de muchos sectores de la sociedad, incluido el del fútbol, que ve amenazado el sistema que lo ha enriquecido los últimos. Los derechos de televisión, en 'stand by' a expensas del desenlance de la competición, suponen una mina económica para los clubes ahora improductiva, con hasta 700 millones en el debe.
Los equipos de LaLiga Santander ya contaban con ese presupuesto, motivo por el que ahora se plantean una ERTE con el fin de cuadrar sus cuentas camino del 30 de junio. No obstante, la Real Sociedad ha decidido tomar un camino alternativo, reafirmando el compromiso de la entidad con sus trabajadores.
Según Diario Vasco, el cuadro txuri urdin no se plantea a estas alturas de 2020 recortar los salarios de sus trabajadores por motivo de la crisis. Desde las oficinas de Anoeta son optimistas en cuanto a la reanudación de la competición, más aún tras el aplazamiento de la Eurocopa, que da un mayor margen de maniobra a todos los actores interesados.
El agujero económico es todavía indescifrable, pero la Real Sociedad, gracias a las buenas prácticas de los últimos años, no ve por el momento problema en seguir pagando las nóminas de sus empleados, de las cuáles la de los futbolistas -como es lógico- es la parte más cuantiosa: en torno a un 50% de los gastos.
Una medida valiente, más aún teniendo en cuesta el gasto de remodelación del nuevo estadio, que todavía se está pagando. No obstante, la gran temporada realizada mantiene la sonrisa en San Sebastián, con el equipo como candidato a disputar la Champions League la temporada que viene y ya clasificado para la final de Copa del Rey.