El divorcio con el gol condena a la Real

Así es el fútbol. La Real Sociedad se presentaba al partido como 'favorita' y con la posibilidad de dormir líder, y el Valencia CF lo hacía en horas muy bajas. En la previa no faltaban los habituales comentarios de 'seguro que estos nos la lían'... y nos la liaron. Hasta el VAR nos impidió en el descuento sumar un punto ya que anuló un gol de Le Normand en el 94. Bajonazo.

La Real estuvo desacertada en ataque, y se topó constantemente con el muro defensivo del conjunto ché. En la primera mitad apenas hubo ocasiones, sí mucha posesión pero infructuosa. Los de Javi Gracia estaban bien plantados sobre el césped y no dieron opciones a los de Imanol. De hecho la mejor oportunidad en los primeros 45 minutos fue para los visitantes. En la segunda parte fue otra historia. Incluso se puede decir que el fútbol fue injusto con los txuri urdin porque asediaron la meta de Jaume Domenech pero no lograron perforarla.

Y la historia de siempre se repitió. Tanto perdonar... que a Maxi Gómez le bastó una para que los tres puntos se fueran a Valencia. Fue injusto, pero este juego es así y a la Real le tocó la cara amarga. Y esta vez, aunque no valen excusas, tampoco ayudaron las decisiones arbitrales. Perdonó un penalti sobre Januzaj en el primer tiempo, y negó el gol de Le Normand en el descuento. 'VARGÜENZA'.

No salió nada bien este martes. Porque incluso Adnan Januzaj, el mejor del partido, se marchó con problemas físicos del campo. Noche para olvidar. Y lo del videoarbitraje que lo miren de una vez. Siempre es el mismo suplicio para los mismos.

Dominio infructuoso

La Real salió a dominar desde el inicio, mientras que el Valencia CF apostó por una presión muy adelantada. A los cinco minutos Silva lanzó una falta por derribo a Merino. Parecía que los de Javi Gracia no tenían mucha intención de discutir la posesión a los txuri urdin.

La mejor jugada de lo que se llevaba disputado de partido llegó en el minuto 12, que de haber terminado en el fondo de la portería hubiera sido el gol de la temporada. David Silva abrió bien el balón a Barrenetxea, el donostiarra centró al primer palo, e Isak sacó un remate de espuela que salió por poco por encima del larguero. Un detalle de clase descomunal del sueco que no tuvo final feliz de milagro. Qué bien le hubiera venido ese gol a la Real y al delantero realista para volver a recobrar la confianza...

Los de Imanol Alguacil cargaban su juego sobre todo por la banda de Barrenetxea que intentó una pared en la frontal que le hubiera dejado en una situación inmejorable para el disparo. A la Real le costaba generar ocasiones. Al equipo le hacía falta un poco más de pausa. El Valencia sin embargo comenzaba a estirarse, y en el 27 Wass obligó a Remiro a lucirse con un paradón a latigazo del danés. La ocasión más clara del partido hasta el momento.

La polémica llegó en el 28' cuando Januzaj fue derribado en el área. El belga recortó sobre Álex Blanco y posteriormente fue agarrado. Fue una enganchada leve, pero agarrón que perfectamente podía ser penalti, pero no. A la Real no le pitan pena máxima a favor así como así, por lo que el juego continuó y minutos después Martin Zubimendi vio amarilla por derribo a Kondogbia, que se iba en carrera.

El partido se había nivelado. Incluso los ché estaban teniendo mayores ocasiones. Primero por medio de un remate de Kang in Lee que pegó en Aritz, y luego Kondogbia. No estaban finos los de Imanol en esta fase del encuentro, y el Valencia se mostraba bastante solvente sin balón.

Y es que la Real tenía el balón, pero no lograba jugar a lo que quería. Se echaban de menos más combinaciones entre Silva y Januzaj o con Barrenetxea. Costaba generar peligro, mientras que los de Javi Gracia con menos elaboración llegaban más fácil.

La primera parte no dio más de sí y se llegó al descanso con 0-0 en el marcador, un primer tiempo dominado por la Real pero en el que las ocasiones fueron para un Valencia que estuvo bien plantado sobre el terreno de juego. A la Real le costó generar y hacer más combinaciones con sus hombres de ataque. Era necesaria una marcha más en la segunda mitad.

La injusticia del fútbol

Mikel Oyarzabal salió en la reanudación en lugar de Ander Barrenetxea. El posicionamiento de la Real era el mismo del primer tiempo pese al cambio del eibarrés, aunque Imanol buscaba menos uno contra uno y más juego interior y combinativo.

El Valencia seguía firme en defensa, mientras que los txuri urdin tocaban y tocaban pero costaba mucho entrar. No obstante poco a poco los de Imanol comenzaron a embotellar a los de Javi Gracia. En el 54' Jaume Domenech salvó a su equipo con una gran intervención tras un disparo durísimo de Oyarzabal, y cuatro minutos después un centro de Januzaj se paseó el área del Valencia sin encontrar rematador.

La línea de presión de los visitantes se había echado atrás y la intensidad que ejercían ya no era la misma del primer tiempo. Esto generaba que la Real encontrara mayores espacios y favorecía las llegadas. Los de Imanol acechaban; se merecían ya ir por delante porque habían hecho más méritos para ir con ventaja.

Imanol metió en el campo a Portu, Guevara, Roberto López y Willian José. Uno de los sustituidos fue Januzaj, el mejor del partido, y con el temor de que el belga pudiera estar tocado ya que se echó al suelo antes de ser sustituido.

El marcador seguía 0-0 pero era ya un monólogo de la Real. Faltaba afinar en el último pase. ¿Y qué pasó? Lo que ocurre siempre en estos casos, que en los mejores momentos de los locales no se logró acertar con la definición y en la única llegada de la segunda parte del Valencia se pusieron por delante. Oyarzabal había estado cerca de marcar, y en la jugada siguiente Le Normand estuvo lento y Gayá pilló al equipo desajustado. Su centro lo aprovechó Maxi Gómez, que no perdona. Enorme jarro de agua fría. Así es el fútbol.

El cronómetro volaba y la Real se había quedado muy fría. No encajó bien el gol y se desactivó. Sin embargo todo pudo cambiar al final. En el 94' Le Normand marcó a la salida de un córner, y el árbitro concedió el tanto. Pero faltaba el VAR. Y este no quería que los tres puntos se quedaran en Donostia porque anularon el gol al ver una mano inexistente. Ya son demasiadas veces. Muchas siempre en contra para los mismos.

Los realistas encajan la primera derrota de la temporada, quizás cuando menos se esperaba. No hay tiempo para lamentarse, ya que el sábado llega el Getafe.

Próxima jornada

En apenas cuatro días, la Real Sociedad volverá a la acción. Y es que este sábado los txuri urdin disputarán el partido correspondiente a la jornada 5 de LaLiga Santander. Recibirán al Getafe CF en el Reale Arena, a partir de las 18.30 horas.