El Sturm Graz culpa a la humedad en Anoeta de su brote de coronavirus
El pasado 4 de noviembre se enfrentaron en el Reale Arena la Real Sociedad y el Sturm Graz en el cuarto partido de la fase de grupos de la UEFA Europa League. El resultado fue de 1-1, y fue celebrado por los austríacos como si fuera una victoria. Lo que ya no les hizo tanta 'gracia' fue lo que vino después.
Y es que pasados unos días del encuentro se produjo un brote de coronavirus en la plantilla del Graz que afectaba a jugadores y cuerpo técnico. De hecho tuvieron que cancelar el partido de Bundesliga del 7 de noviembre. El mismo jueves día de partido contra la Real se detectó el primer caso. El delantero Kelvin Yeboah resultó contagiado y se quedó haciendo cuarentena en un hotel donostiarra.
Desde entonces fueron aumentando las pruebas y los test de antígenos, y a su vez los casos positivos que derivaron en un brote. Lo más llamativo ha venido después, con las palabras del director deportivo del Sturm Graz que culpó a la lluvia caída en Anoeta durante el partido y al juego intenso, como una de las causas de los contagios. "Eso deriva en una debilidad del sistema inmunológico", según Schicker.
Aunque más de las tres cuartas partes de todos los jugadores de la Bundesliga están vacunados, el Sturm Graz tiene una tasa de vacunación por debajo del promedio de la liga. Schicker dice: "Ofrecimos cuatro citas de vacunación. Eso fue aceptado en parte, en parte no. Entiendo absolutamente cuando un jugador dice que no quiere vacunarse. No se puede obligar a nadie a vacunar, eso es lo que dice la ley, de lo contrario lo haríamos".
