El día de la Marmota
Como si de la divertida película de Bill Murray se tratase, el Sevilla lleva 17 temporadas tropezando con la misma piedra. No es capaz de ganar en Pamplona. No importa que el estadio se llame Sádar o Reyno de Navarra. No importa que lo visite en Liga, Copa o UEFA. No importa que haga sol, llueva o nieve. Desde que en la temporada 92-93 Rafa Paz pusiese la firma a un 0-1, nadie ha sido capaz de repetir logro. ¿El motivo? Nadie lo sabe. Simplemente, es incapaz de ganar allí. Ni siquiera Juande Ramos lo logró. En su película, Murray tenía que hacerlo todo bien para pasar de página en el calendario. Algo así tiene que ocurrir con el Sevilla.
Para lograr el éxito en la empresa, esta vez no podrá sacar las castañas del fuego Luis Fabiano. La estrella sevillista tiene problemas y se cuida para lo que viene, que es mucho. Dicho esto, habrá delantera novedosa. Kanouté y Negredo apuntan a titulares con Renato y Koné en algunas (las menos) quinielas. Dentro de la política de rotaciones del técnico parece también lógico que descanse Escudé, pudiendo ocupar su sitio Fazio o Drago. En el centro del campo, podría tener su hueco Lolo. Es uno de los cambios habituales y su hora está a punto de llegar. En Osasuna faltan Nekounam, Azpilicueta y Monreal. Sus sitio los ocuparán Rúper, Oier y Calleja.
Toca por tanto ganar a su Osasuna para acabar con la historia y para impedir que se abran las primeras distancias significativas en la tabla por pronto que sea. Barça, Madrid y Valencia aprietan
