Kenia renueva su sangre y su poder en Itálica
Este domingo, el keniano Leonard Komon tenía la oportunidad de emular a Kenenisa Bekele y romper la maldición de Adriano en el treinta aniversario del Cross Internacional de Itálica. Después de vencer en las ediciones de 2010 y 2011, no sólo tenía a su alcance conseguir por tercera vez el cetro en Santiponce sino que, además, podía hacerlo de forma consecutiva, algo que nadie, tampoco Bekele, ha conseguido. Sin embargo, ni siquiera pudo entrar en la pelea. La lluvia o, mejor, el barro no es terreno para Komon. Pronto quedó claro que esta vez no sería el rey en el conjunto arqueológico romano, que no recibiría el laurel ni aparecería en los titulares.
Se descolgó Komon de la lucha en la carrera internacional masculina y, debido a la baja obligada de Imane Merga, todas las miradas se posaron sobre Moses Kipsiro, ganador del cross poncino en 2008 y 2009. También él podía igualar a Kenenisa, colocar su nombre en lo más alto las mismas veces que el atleta etíope, tres. Y el ugandés sí que entró en la disputa. Pero Kenia ha decidido darle continuidad al poder que ahora posee y que históricamente le corresponde en Itálica; renovar su sangre con nuevos atletas indomables. Junto a Kipsiro, dos jóvenes kenianos: Geoffrey Kipsang, actual campeón del mundo junior, y Albert Rop, de sólo 17 años, que sin figurar en ninguna quiniela, sin que su nombre hubiese sido mencionado antes de la gran prueba, apareció en escena sobre el enfangado circuito y sorprendió a todos.
Ambos eclipsaron a Kipsiro y se disputaron la victoria hasta que un resbalón le hizo a Rop perder unos metros en la última curva, vitales para que Kipsang consiguiera cruzar la meta antes que su compatriota, en un tiempo de 30 minutos y 53 segundos, e inscribiera por primera vez su nombre en lo más elevado de Itálica.
De los españoles, impresionante papel de Ayad Lamdassem, de origen marroquí, que acabó la prueba en sexta posición por delante de otros cinco africanos, entre ellos Kuma, Chepkok o el propio Komon. Lamdassem aguantó el tipo y acabó calcando su actuación de 2011 (incluso en tiempo, sólo dos segundos más lento esta vez). Y tras Komon, cuatro españoles: Javi Guerra, Juan Carlos Higuero, Jesús España y Carlos Castillejo, por este orden. Chema Martínez acabó vigesimosegundo.
Un par de horas antes, fue el turno de la carrera internacional femenina, también dominada por dos kenianas: Linet Masai y la campeonísima Vivian Cheruiyot, las dos últimas ganadoras en el circuito del conjunto arqueológico. Y lo cierto es que Masai no dio oportunidades a nadie, ni siquiera a su compatriota y gran rival. Tantas veces le ha arrebatado Vivian a Linet el triunfo en los últimos tiempos (por ejemplo en el Cross del año pasado) que debe haberse tomado Masai esta victoria como algo muy especial. Movida, tal vez, por este reto personal ha volado sobre Itálica marcando un fuerte ritmo desde el inicio, dominando en todo momento y cruzando la meta con casi 18 segundos de ventaja sobre Cheruiyot. En tercer lugar, a la altura de Vivian, entró la etíope Wude Ayalew.
De las españolas, la mejor ha sido Diana Martín, que ha concluido décima. Y, tras ella, aunque a bastante distancia, Lidia Rodríguez, Sonia Bejarano y Alessandra Aguilar, que no ha podido repetir su gran actuación del año pasado, cuando fue sexta.
Carlos Tur