Daniel Hestad, el emblema del Molde

En la previa del partido que este jueves enfrenta al Sevilla FC y al Molde, valedero para los dieciseisavos de final de la Europa League, el jugador elegido por el cuadro visitante para dar la rueda de prensa junto a Ole Gunnar Soljskaer fue Daniel Hestad, y la elección no fue por casualidad.

El centrocampista es el gran jefe del equipo noruego, uno de sus grandes emblemas. Nacido en la localidad de la península de Romsdal hace más de 40 años, debutó con el equipo de su ciudad el 23 de mayo de 1993, hace cerca de 23 años, en un duelo ante el IK Start. En su siguiente partido, ante el FK Lyn, anotó el primero de sus cien goles con el equipo noruego.
Desde entonces, Hestad ha sumado 594 encuentros –en todas las competiciones noruegas y europeas- con la camiseta de su equipo de toda la vida, alcanzando el centenar de goles. Entre 2003 y 2005 tuvo una aventura en la Eredivisie holandesa, concretamente en el Herenveen, donde jugó 47 partidos y entre ellos cinco de la Copa de la UEFA –justo la edición anterior a la primera que ganó el Sevilla-.
El centrocampista alcanzó la cuarentena en el pasado mes de julio y es, de sobra, el más veterano de la plantilla. De hecho, el jugador que le sigue en edad es Moström, que tiene ocho años menos. Es más, ocho de sus compañeros ni siquiera habían nacido cuando él ya había debutado con el equipo y sólo tiene dos años menos que su entrenador.
Internacional con Noruega en ocho ocasiones, entre 1998 y 2003, Hestad es además el segundo jugador que más partidos ha jugado en la liga noruega –competición que ha ganado en tres ocasiones-, sólo por detrás de Roar Strand.  
No está muy claro que vaya a continuar jugando al fútbol en la próxima temporada, que en Noruega empieza en marzo, aunque de momento si está con el Molde en el Sánchez-Pizjuán. Su posible retirada es asunto capital en la localidad de la costa más cercana a los famosos fiordos. Sus 27.000 habitantes están muy pendientes de su futuro y en la sala de prensa del estadio nervionense se le cuestionó sobre el tema.
“Ya veremos el jueves como sale el partido. Llevo veintitrés años jugando con el Molde y el tiempo dirá lo que pasa en el futuro”, aseguró el futbolista, que en todo caso no se plantea dejar el club. “Estamos muy contentos y agradecidos con él. Ojalá pueda seguir más tiempo”, dijo su técnico Soljskaer. Un emblema que pisará el Sánchez-Pizjuán en el que puede ser su último partido como profesional fuera de su país.