La historia del otro Betis a orillas del Pisuerga
Lo dice su himno. Con la gente que le quiere y más allá de la frontera, siempre habrá alguien que diga "Viva el Betis manquepierda". Una pasión que va mucho más allá de los límites de la propia ciudad y que tiene 'descendientes' repartidos en todas partes del mundo.
Precisamente esta semana recibe el Real Betis al Valladolid. Una ciudad en la que más allá del conjunto pucelano existe un equipo con un sentimiento arraigado y que se expone como la cuna del fútbol de cantera en Castilla y León.
La historia del Betis C.F: Fundado por estudiantes sevillanos y béticos, comparte escudo, vestimenta y amor a las trece barras
Allí, a las orillas del Pisuerga, nació el actual Betis C.F. Un equipo cuyos rasgos imitan a los de Heliópolis. Viste verdiblanco y casi comparte escudo. De hecho su símbolo más representativo, es un calco de aquel que diseñara en su tiempo para el conjunto hispalense José María de la Concha, formado por un triángulo, su particular corona y las 13 barras verdiblancas (aunque el de la actualidad tenga 15).
La entidad se fundó en la década de los 40. Un nacimiento que llegó tras la disputa entre el Antiguos Alumnos y un equipo compuesto entre estudiantes sevillanos y béticos. Un equipo que desde entonces ha abanderado las trece barras y que no en pocas ocasiones ha recibido el reconocimiento del Real Betis.
Reconocimientos del propio Betis
Tal es así que incluso recibió la bandera conmemorativa del centenario de la entidad. Además fue invitado para el torneo de ese mismo año entre equipos verdiblancos que organizó el Real Betis, aunque nunca se llegó a disputar.
Un equipo que alcanzó su cénit en los 90, tras subir hasta en dos ocasiones a Tercera División. Ahora divaga por Primera Regional, aunque lucha por ascender. Un equipo cuya principal seña de identidad es la cantera, de donde han salido futbolistas como Benjamín e Iván Zarandona, Escudero, por el que aún guardan una disputa judicial con el Real Murcia.
El Betis C.F de Valladolid. O lo que es lo mismo. Cómo demostrar que hay mucho beticismo más allá de las fronteras de la ciudad. Un ejemplo de cantera, de valores y por qué no, de otra forma más de expandir y de dar a conocer el sentimiento por las 13 barras.