Setién "siempre" ha querido al Rácing, pero desea "pasar la eliminatoria"
El entrenador del Betis, Quique Setién, ha manifestado este miércoles en rueda de prensa que siempre ha querido al Rácing de Santander, su rival de mañana en la ida de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, al que lo unen "profundos sentimientos", pero desea "pasar la eliminatoria".
Para Setién, el hecho de que su adversario milite en Segunda B encierra "un punto de dificultad" que lo hará afrontar el duelo "con mucha seriedad" porque "esta competición reduce las diferencias de categoría", por lo que "en las charlas" intenta "dejar claro que no será fácil ganar" a un rival que atraviesa "un gran momento".
El deseo del técnico bético es "avanzar en la Copa", aunque debe compaginarlo con "pensar en los jugadores que pueden estar cansados, en otros tocados u otros que necesitan minutos" como los recién salidos de lesión (Andrés) Guardado y Joaquín (Sánchez), quienes "están mejor y la intención es que jueguen un rato".
A Setién no le preocupan las tres derrotas consecutivas en Liga, pues su "profesión es esto, estar en lo alto de la carpa haciendo equilibrio" porque la "gente se frustra cuando pierde" y, aunque asumió no "conocer a muchas aficiones", sí cree que en Sevilla existe "más pasión que en otros sitios", por lo que pidió al bético que "lo analice todo con perspectiva".
"Las críticas las entiendo porque hay un sentimiento hacia tu equipo que te entusiasma o frustra. En algunos lugares son más expresivos que en otros. Pero la derrota es parte de este juego y no puedes analizas las cosas por un día. Este Betis, desde que estamos nosotros, está en crecimiento pese a lo sucedido en Getafe. En el resto de España nos valoran, no se fijan en ese resultado", añadió.
Quique Setién no quiere detenerse en la clasificación actual de su equipo, decimotercero, sino "pensar que el futuro será mejor" y espera "convencer a los agnósticos con buenos resultados", si bien instó a "mirar los datos positivos en lugar de los negativos".
El preparador cántabro respondió que "es verdad" que su equipo "no está metiendo goles", pese a lo cual cree que "los socios están encantados con el Betis" y en las redes sociales ve "cosas muy positivas", aunque le resulte "imposible contentar a todos" y entiende que la gente se enfade cuando no está a la altura," como sucedió el domingo en Getafe".