En-Nesyri, en racha, en la pelea

"Tendremos que sufrir como cabrones". Eso decía Julen Lopetegui en la previa del partido ante el Huesca. La realidad es que para este Sevilla esa llamativa frase sirve para casi todos los partidos, porque el conjunto nervionense 'escoge' ese camino para levantar y llevarse los partidos. Ante el Huesca el equipo sevillsta se llevó los tres puntos sufriendo, en el tramo final del partido y con un, uno más, de En-Nesyri, que acumula goles por partidos y rendimiento en cada encuentro. El marroquí desatascó un partido complicado ante los aragoneses, en el que el Sevilla no andaba demasiado fino, aunque no sufría, y en el que faltaba algo de chispa en ataque. Era lo que importaba en definitiva, llevarse los tres puntos de una cita complicada y que significa mucho por lo que es y por lo que viene.

Porque este triunfo es el tercero consecutivo en LaLiga del Sevilla, buena respuesta y reacción después justo de perder tres seguidos. Ya mete además al equipo de Lopetegui en los puestos altos de la clasificación, con dos partidos menos además. Y es trascendente por lo que viene. La semana que viene es de las de traca, de las bonitas, con Chelsea primero en la Liga de Campeones y Real Madrid después. Y afronta el Sevilla estos días con cinco victorias consecutivas y reencontrándose cada vez más a sí mismo.

Es verdad que aún queda trayecto para ser la mejor versión, posiblemente lo irá logrando a medida que sus mejores jugadores encuentran su mejor rendimiento. Pero al menos ya en Huesca el Sevilla apenas sufrió atrás. Solo una ocasión clara del rival en todo el partido y Vaclik casi inadvertido. El centro del campo estuvo correcto, sin alardes, pero hizo de la posesión y la presión su bandera, sin tantas pérdidas de la pelota. Y el ataque estuvo algo romo y falta de sorpresa hasta que aparecieron en una buena combinación ya cuando el partido parecía agotarse Ocampos y En-Nesyri. El marroquí marcó el gol del triunfo para el Sevilla, que durante todo el partido había sido mejor aunque no muy peligroso, y convirtió en victoria uno de esos partidos en los que no hay brillantez.

Eso sí, el gol del delantero no debe tapar algunas rémoras. El Sevilla debe encontrar soluciones antes en partidos como este. Debe buscar más sorpresa, más desborde, más desequilibrio y remate pero no de manera ocasional, sino sistémica. Por ahí se atascan los partidos y por ahí los encuentros siempre se resuelven "sufriendo como cabrones", Lopetegui dixit.

Hasta el momento, también es cierto, y volvió a ocurrir en Huesca, el técnico vasco está manejando a las mil maravillas el banquillo. De nuevo los jugadores que salieron de refresco mejoraron al equipo. Y no solo En-Nesyri, fundamental, también Rakitic (una salida de balón suya superando líneas origina el gol) y hasta Aleix Vidal, que sin estar bien arriba sacó una pelota clave en casi la última ocasión del Huesca, y era su debut. Óscar dio ritmo aunque poco acierto y Gudelj salió para amarrar el partido. Por lo que fuera, el Sevilla fue mejorando con los cambios hasta llevarse el partido.

Sea como fuera, el Sevilla coge la forma y la racha, y para racha la de En-Nesyri, que mete a su equipo arriba en la tabla y le pone la velocidad de crucero al Sevilla en esta Liga.