Nadie conoce a nadie

Nada que ver el Betis que se mostró en el Estadio de La Cerámica con el que venía apareciendo esta temporada. Los de Pellegrini firmaron probablemente su peor partido del curso y se vieron superados de principio a fin por el Villarreal, un rival de Champions, ante el que los verdiblancos, esta vez de azul, no exhibieron sus repetidas virtudes.

Al Betis le faltó chispa en su séptimo partido de esta maratón de encuentros. Seguramente tuvo que ver el planteamiento y el potencial del rival, que obligó a los de Pellegrini a jugar a contraestilo. La pelota, por ejemplo, no fue para el conjunto bético. Tampoco apareció esa capacidad de reacción, otras veces surgidas en los momentos finales, con cambios desde el banquillo y golpes de calidad de futbolistas, que varían resultados.

Sí tuvo como denominador común el habitual error individual, que ciertamente fue el que empezó a decantar el duelo del Betis en Villarreal. Esta vez fue Bellerín, poco antes del descanso, como el jueves pasado lo fue Pezzella, o a principio de temporada Montoya contra el Mallorca o Canales contra Osasuna. Entonces fueron solucionados, en tierras castellonenses no.

Claro que el partido va mucho más allá del fallo de Bellerín que abrió la puerta Danjuma, que en la segunda parte repitió diana en una acción de calidad ante Rui Silva. Tampoco las individualidades tuvieron su mejor tarde. Empezando por Fekir, que lo intentó pero no fue lo estelar de otras veces, pasando por los laterales o el mediocampo que, con William Carvalho y Guido Rodríguez, perdió la batalla.

Con todo, la clara y justa derrota del Betis contra el Villarreal no debe hacer perder la perspectiva del rendimiento verdiblanco en la maratón de los siete partidos últimos. El tiempo dirá si es un borrón o no. Sí constata la dificultad que le planteó el cuadro de Emery, un rival de altura, que supo desactivar todas y cada una de las virtudes béticas.

En esta ocasión fueron ocho los cambios que realizó Manuel Pellegrini en la alineación respecto a la que jugó el jueves en Hungría. Solo se mantuvieron en el equipo Rui Silva, Germán Pezzella y Nabil Fekir. Una de las novedades fue William Carvalho, ausente en la cita europea y que había estado entre algodones los primeros días de las semana.

Contrariamente a lo habitual, el Betis no manejó la pelota de la que se hizo dueña el Villarreal. Yerami Pino hacía daño entre líneas en esos primeros compases. Claro que el verdadero veneno lo pusieron los verdiblancos con varias oportunidades en acciones verticales. La primera de William Carvalho con un tímido pero intencionado disparo desde la frontal con la izquierda (8'). Luego lo intentó Aitor Ruibal desde fuera (9').

El primer acercamiento del Villarreal exigió la mejor versión de Rui Silva que se impuso en el mano a mano a Yeremi Pino (12'). El Betis hacía más daño robando arriba que elaborando y se echaba de menos más presencia de Carvalho y Fekir. Más clara fue la ocasión para los locales en la que Edgar salvó bajo palos el remate de Danjuma con un dubitativo Rui Silva (26').

Sin la posesión, el Betis encontraba sus opciones en las contras y en alguna acción de Fekir, quien lo intentó en una media vuelta que se fue alta (35'). Respondió Trigueros con un lanzamiento desviado (36'). Cuando todo se encaminaba a las tablas al descanso, un error letal de Bellerín generó una acción en la que Danjuma perforó la meta bética (46'). El lateral entregó el balón a Coquelin que conectó con su compañero para marcar. Otra vez un fallo antes del intermedio.

Segundo tiempo

Con el cambio de Tello por Juanmi se inició el segundo tiempo. El Betis no terminaba de encontrarse cómodo. A los de Pellegrini le costaba superar la presión del Villarreal y el 2-0 parecía más cercano que el empate, a tenor de las sensaciones. En busca de soluciones el Ingeniero tiraba de Álex Moreno y Rodri que suplieron a Miranda y Aitor Ruibal.

Edgar volvió a salvar al Betis tras un remate de Yeremi Pino después de revolverse (61'). Danjuma, esta vez en una contra, volvía a avisar (63'). Los heliopolitanos estaban espesos y no terminaban de inquietar a Rulli. Un cabezazo de Pezzella en un córner fue la primera oportunidad bética del segundo acto (67'). Del posible 1-1 llegó el 2-0, otra vez con Danjuma como goleador. Demasiado espacio entre los defensores béticos para el talento del atacante y el del pasador Moi Gómez.

Camarasa y Borja Iglesias ingresaron en el campo por William Carvalho y Willian José. Seguía sin aparecer la mejor versión bética ni había respuestas el dominio local. Un centro lateral de Álex Moreno no fue rematado con dirección por Camarasa en el área (79'). El Betis perseguía sombras y Danjuma buscaba el tercero, como la ocasión en la que se le marchó el remate fuera por poco. Rodri, con un disparo lejano, lo había intentando antes (86'). Fekir también buscaba hacer daño aunque Rulli estuvo atento (89'). Sin embargo, el marcador no se movió y los heliopolitanos cayeron derrotados.