La policía obtiene más pruebas para acusar a Promes de intento de homicidio
Quincy Promes fue acusado de asesinato en el verano de 2020 por un supuesto intento de apuñalamiento a su familiar. El ahora jugador del Spartak de Moscú lo negó todo, pero la policía ha encontrado pruebas que inculpan claramente al internacional neerlandés.
Según el medio NOS, la policía holandesa registró unas llamadas telefónicas en julio del mismo año, en las que el jugador confesaba su padre que había apuñalado a su primo y que lo quería matar. Según el citado medio, en la transcripción de las conversaciones grabadas se puede leer que Promes quería matar a puñaladas a su primo. Las llamadas telefónicas tuvieron lugar en la noche poco después del apuñalamiento.
De hecho, las conversaciones telefónicas desvelarían una clara intención de Promes de atacar a su primo. "Puedes decir: alcohol, porque si yo estaba tan borracho, me lo hubiera tomado al comienzo de la fiesta. Esperé bien". Ante tales conversaciones, un abogado asegura que el ex del Sevilla puede ser acusado por intento de homicidio. “Veo en las escuchas, pero también en las declaraciones de los testigos, motivos para suponer que ha habido premeditación”, declaró.
Ante tales afirmaciones la reanudación del caso que sería para el 31 de marzo, se tendría que posponer indefinidamente. El Ministerio fiscal no quiere pronunciarse ante tales sospechas ya que las escuchas que ofreció el Equipo de Inteligencia Criminal eran totalmente atípicas.
