Gattuso engatusa a Pellegrini
Gennaro Gattuso no era un futbolista brillante, pero era listo y racial. Ya veremos cómo es como entrenador. De momento, este jueves Gattuso engatusó a Pellegrini. Sus palabras en la previa sobre el Betis ("es un equipazo") retratan la verdad, aunque probablemente le dio ojana y las exageró para quitarle a los suyos presión. Y lo logró, porque el Valencia CF fue superior y derrotó (3-0) al Real Betis en el choque de la 14ª jornada de LaLiga Santander.
No muy superior, eso sí, si bien lo suficiente para aprovechar los errores del Betis. Y de Pellegrini, en concreto. El chileno no estuvo fino al no quitar a Édgar cuando vio la primera amarilla, teniendo en el banquillo a Pezzella y el canterano Félix Garreta. Cuando el central vio la segunda tarjeta en un lapso de diez minutos, se acabó lo que se daba. Con una amarilla hay que tener mucho cuidado en el campo. Pero, sobre todo, lo que quizá puede ocurrir es que no hay que estar ya en el campo.
Y es que este Valencia CF no pareció ante el Real Betis tan irregular y, por momentos, endeble como demuestra la clasificación. De hecho, se pareció mucho al que inició con brillantez LaLiga Santander. Un equipo correoso, entregado a una presión alta endiablada, focalizada en el balón pero extensible a la estructura de salida del rival. Así ahogó al principio al cuadro bético, que no rehusó la pelea.
Gattuso ahogó el fútbol del Betis
Pellegrini también concentró su presión en la banda central del campo, de manera que el peligro tenía que llegar por las bandas. Y así fue. Gayá y Lino lo promovían para los locales, y Luiz Henrique y Juan Cruz, para los verdiblancos. El Valencia tenía más la pelota e iba ahogando el fútbol del Betis, hasta el punto de que Canales tenía casi que meterse en su área para que se sacase el balón de atrás.
Gattuso no está logrando de momento que su Valencia sea lo que él quiere, aunque sí logró que al Betis le costase ser lo que Pellegrini quiere. En cualquier caso, el conjunto bético fue poco a poco soltándose, ayudado también por el buen papel de Rui Silva, quien atajó lo que le correspondía y tuvo la suerte de que Musah la estrelló en el palo en una doble oportunidad que fue casi lo más peligroso por parte del anfitrión.
El Betis también tuvo las suyas, sobre todo la del debutante como titular Juan Cruz tras un jugadón de Canales y Willian José. El delantero fue desgranando sus virtudes también poco a poco aprovechando la ausencia por sanción de Borja Iglesias. Y recordó al de la temporada pasada por primera vez este año. El canterano, por su parte, confirmó que merecía la camiseta de titular, porque es pelotero de categoría, de los que no va a necesitar una mili cedido en otro equipo.
Ritmo frenético de ida y vuelta
El ritmo se sostuvo frenético y este Betis no le hace ascos, porque ha aprendido a competir siempre, se juegue como se juegue. Ya lo demostró en San Sebastián, le va la marcha, aparte de jugar bien al fútbol. Pese a la ausencia de Luiz Felipe, los centrales béticos rindieron bien para frenar los centros que llegaban cuando el Valencia entraba por bandas.
El tono de ida y vuelta se mantuvo y los locales creaban más peligro por pequeños errores del Betis que por otra cosa. Los hombres de Pellegrini, como pasó en Anoeta, se fueron reencontrando con su propuesta, con la que enarbola el chileno, y empezaron a encontrar rédito al juego de toque mirando de reojo a las bandas.
La llamada del Mundial y el error de no sacar a Pezzella
Pellegrini oyó la llamada inevitable del Mundial y sacó del campo a William Carvalho y Guido, que estarán en Qatar. Estas cosas que hacen los entrenadores para agradecer a ciertos jugadores su compromiso, en este caso por no haberse quitado del cartel como otros. Retrasó a Canales con Paul y metió a Rodri como interior. En lo que no cayó el sabio entrenador fue en que Édgar ya tenía tarjeta. No sacó a Pezzella.
Y en diez minutos Édgar se iba a ir a la caseta por doble amarilla. La lluvia arreciaba en Mestalla y especialmente para el Betis. Porque la segunda amarilla del central daba pie a una falta peligrosa en el borde del área que André Almeida puso en la escuadra. Un minuto letal que cambió el signo del partido, poniéndolo muy cuesta arriba.
Rui Silva, sin Mundial pero enorme
Como no podía ser de otra forma con uno más y ante su público, el Valencia CF se vino arriba. Menos mal que Rui Silva dio su mejor versión pese a escasas horas antes se había quedado repentinamente fuera del Mundial. El portugués soportó el peso de un Real Betis tocado por la inferioridad. Casi se lesiona, de hecho, el meta. Y no pudo detener el penalti decretado contra el Betis en una jugada entre Álex Moreno y Kluivert. Minuto 80 y 2-0. Fin del partido.
Lo que vino en los últimos diez minutos fue un último esfuerzo del once verdiblanco por no permitir la goleada, por dejarse la piel para que este tramo final del partido no dejara una sensación injusta con lo que ha hecho el Betis antes del del Mundial. La goleada la culminó Kluivert en el descuento y quizá resultó demasiado castigo. El Betis pudo irse al parón en puestos de UEFA Champions League, aunque se mantiene en los europeos. Y eso no está nada mal, créanme, con las circunstancias en las que vivió el plantel el verano y las bajas que ha tenido en muchos partidos.