40 millones y 10 refuerzos: el historial de Haro y Catalán en el mercado de invierno
La dirección deportiva del Real Betis sigue jugando sus cartas y espera cerrar la plantilla con la llegada del delantero español Ayoze Pérez, quien llegaría cedido hasta final de temporada. Sería ahí, a partir de junio, cuando las partes se volverían a sentar para cerrar las bases de un nuevo contrato, ya con el futbolista en propiedad. Eso sí, para que la operación pueda llegar a buen puerto antes debe materializarse la venta de Diego Lainez, e incluso la desvinculación de Loren Morón, aunque esta segunda posibilidad sigue enquistada.
Sea como fuere, Antonio Cordón, dentro de las limitaciones del club, se ha movido a las mil maravillas en este mes de enero. Apenas 48 horas después de la salida de Álex Moreno cerró a su sustituto y ahora trabaja para subir el nivel en esa zona ofensiva que tantas carencias está teniendo de cara a gol en estas últimas semanas. Un mercado recurrente aunque siempre dificultoso, con clubes maniatados por la dificultad de encontrar jugadores válidos que busquen un nuevo club.
Si finalmente se cierra la llegada de Ayoze Pérez, sumado al fichaje de Abner Vinícius, que firmó por unos 5 millones de euros - por el 50% de su pase- serían once, o diez, según como se mire, los refuerzos que ha realizado el Real Betis en el mercado de invierno desde que Haro y Catalán tomaron el mando del club.
Muchas luces y alguna sombra del Betis en invierno
Los primeros, allá por enero de 2017, fueron Tosca, quien rescindiría su contrato dos años después, y Rubén Pardo, este último en calidad de cedido. A partir de ahí el club fue creciendo, tanto en lo deportivo como en lo económico, y la buena gestión de los dos citados permitió hacer apuestas de envergadura. Una de las más fructíferas fue la de Marc Bartra. El central llegó avalado por lo atractivo del proyecto, cambiando Dortmund por la capital hispalense por unos 10 millones de euros. Ese mismo mercado, en enero de 2018, Rubén Castro regresaba tras su periplo en China, llegando a participar en diez encuentros aquel segundo tramo de temporada con Quique Setién.
En enero de 2019, el ying y el yang. El Real Betis hizo una gran apuesta con el fichaje de Diego Lainez, pero la realidad es que nunca terminó de asentarse por unos motivos u otros. Cuatro años después, una cesión de por medio y cuatro entrenadores, ultima su regreso a México. Sí que salió a las mil maravillas el 'fichaje' de Emerson, por el que pagó seis millones de euros.
Un refuerzo a 'medias' con el FC Barcelona y por el que apenas dos años después sacó una rentabilidad brillante, tanto en lo deportivo como en lo económico. No salió tan bien Jesé Rodríguez, quien disputó cedido ese segundo tramo de temporada sin pena ni gloria.
Ya en 2020 el Betis regresó a México en busca de otra oportunidad de mercado. Aunque empezó con dudas, Guido Rodríguez ha demostrado ser uno de los mejores fichajes de Haro y Catalán desde que controlan el club. Un mes de enero en el que también se firmó, aunque cedido, a Carles Aleñá, que dejó claros y oscuros en Heliópolis.