Oier marca el territorio
El Levante UD se ha movido para reforzar todas las posiciones en el actual mercado de verano, a excepción del centro de la zaga, y la portería no ha sido una excepción. Bajo palos, el conjunto granota cuenta con un nuevo inquilino, el ex del Numancia Aitor Fernández, que llega para completar ese puesto y para aumentar el nivel y la competencia con Oier Olazabal y Koke Vegas. Sin embargo, el primero de ellos no está dispuesto a entregar los trastos de matar y, sin ir más lejos, en el amistoso contra el Albacete, el irundarra marcó el terreno haciendo un partido bastante bueno durante los 90 minutos y permitiendo posteriormente que el Levante UD se llevase el torneo con nada menos que tres paradas en la tanda de penaltis.
Oier está completando una buena pretemporada en los minutos que le ha tocado jugar y frente al Albacete demostró que no piensa soltar fácilmente la titularidad. El vasco no pudo hacer mucho más para evitar los goles del conjunto manchego y, cuando hubo que decidir quién se llevaba el trofeo tras empatar en el tiempo reglamentario, se lució. El cancerbero detuvo tres lanzamientos de penalti, dos a Alfon y a Caro y sobre todo fue muy buena la mano abajo que metió para desviar al poste el lanzamiento de todo un especialista como Néstor Susaeta.
A sus 28 años, la temporada 2018-19 puede ser la de la consolidación definitiva de Oier tras hacerse con la titularidad cuando la Liga pasada acudía hacia su ecuador. Raúl Fernández fue al banquillo y el ex del Barcelona, Real Sociedad y Granada, entre otros, cogió al vuelo el guante que le lanzó Muñiz, refrendado posteriormente por Paco López. Olazabal se mostró un guardameta bajo palos a la altura del Zamora de la Segunda División del año anterior y más completo en el resto de facetas que debe dominar un portero. Además, el irundarra ha cogido poso y la renovación de contrato por tres temporadas, en la que ha sentido el respaldo del club a la importancia que está cogiendo, puede ser otro impulso para el cancerbero.