El Valencia se desmelena en el derbi
El Valencia CF se desmelena en el derbi regional y firma uno de los mejores partidos como local en la presente temporada. El signo del Valencia-Villarreal se decantó muy pronto, cuando en el primer minuto Diakhaby abrió de cabeza el marcador, con cierta dosis de suspense. Comenzada la segunda mitad Cheryshev haría el segundo ante su equipo (está cedido). Rodrigo Moreno en las postrimerías cerró la cuenta de un Valencia que mereció algún gol más y sigue mirando a Europa.
Una pancarta recordando al pequeño Julen en la Grada de Animación; un once de gala; una tarjeta perdonada a Víctor Ruiz y un gol de cabeza de Diakhaby -previa consulta al VAR pues el colegiado lo había anulado por fuera de juego de otro compañero- en el primer minuto de juego pusieron patas arriba el derbi.
El tanto llegó tras una falta lateral botada magistralmente por Parejo que Diakhaby remató de forma implacable a la red.
Con el marcador a favor, y con una dosis extra de intensidad, el Valencia se fue a por el segundo. Cheryshev debió marcarlo en el siete, pero Asenjo le hizo una gran parada; casi tan espectacular como la de Neto a Fornals en el 21 que Neto despejó de puños en el primer palo.
El equipo estaba desmelenado. Quería ganar, demostrarse a sí mismo que la crisis es pasado y recargar la confianza pensando en la batalla de la Copa ante el duro Getafe.
Fue una acción aislada porque el que dominaba y quería ampliar su ventaja siempre fue el Valencia CF. Por las bandas desbordaba al Villarreal que no daba a basto para despejar todos los balones que se acercaban a su área. Faltaba, como casi siempre, el acierto en el último pase, en los metros finales. Sin eso, el dominio es más efectista que eficaz. Estéril.
Eran momentos de buen juego valencianista. La parroquia se divertía, pero el segundo gol no llegaba y eso que Dani Parejo estrelló un balón en la escuadra desde fuera del área. Pero ni por esas el Valencia logró ampliar su renta antes del descanso.
Cheryshev sentencia
Tras el paso por vestuarios la tónica sí cambió. Primero fue Mina quien rozó el gol y, a la siguiente, el Valencia no perdonó. Cheryshev robó el balón, se la dio a Parejo y este se la devolvió medida al ruso para que marcara el 2-0. Mestalla vibraba. Por fin un partido tranquilo.
Comenzada la segunda mitad Cheryshev haría el segundo ante su equipo (está cedido) y cerró la cuenta de un Valencia que mereció algún gol más y sigue mirando a Europa
Con espacios el Valencia jugó a placer y pudo ampliar su renta. El Villarreal era un pelele en las botas de los valencianistas. Rodrigo debió marcar, pero Asenjo y la mala racha del punta, lo evitaron. Las ocasiones se sucedían, Carlos Soler tuvo tres consecutivas. El equipo estaba desmelenado. Quería ganar, demostrarse a sí mismo que la crisis es pasado y recargar la confianza pensando en la batalla de la Copa.
Y así, meditando en la Copa, Marcelino sentó a sus bandas. Se fueron Cheryshev y Carlos Soler y salieron Wass y Ferran Torres. Santi Mina, muy ovacionado, completaría la tripleta de cambios dejando su puesto a la joya de la cantera Kang In Lee.
Ferran, el extremo de Foios, tuvo tiempo para sacarse un centro medido en el 85' que Rodrigo remataría de cabeza al fondo de la red cerrando una goleada que es un espaldarazo de confianza vital para los siguientes compromisos del equipo. No habría tiempo para más.