Peter, el periodista no es noticia
Desde hace muchos años adopté como propia la frase "el periodista no es noticia". Acompaña la firma de mi correo electrónico y la he interiorizado como una manera de vivir mi profesión y hasta mi propia vida. Nosotros, los periodistas, no somos noticia, no somos lo importante. Lo verdaderamente importante, creo, es contar lo que sucede y que después ustedes juzguen, mediten, y formen su propia opinión. Pocas veces escribo por tanto de la profesión o entro en debates sobre ella, pero cuando Peter Lim a través de sus representantes en Valencia CF: Anil Murthy y Kim Koh principalmente nos anteponen a lo que realmente sucede, creo que merecen saberlo. Así que, tomen esta columna como un paréntesis a lo que me gusta, que es hablar de fútbol.
Que restrinjan el tiempo y los días que la prensa estará donde esté el equipo -véase en la Ciudad Deportiva- es un problema interno que nosotros los periodistas con más o menos sagacidad e incomodidad iremos solventando para seguir contándoles quién está lesionado, quién puede jugar y, en general, todo lo que acontezca en torno al equipo.
En definitiva, no es noticia. Y, ojo, tampoco es la solución para el problema o los problemas de desafección que tienen Peter Lim, Meriton y sus responsables en la capital del Turia. Estas decisiones no van a aminorar las críticas cuando las merezcan; ni los elogios si se hacen acreedores; ni va a solventar el vacío existente tras la marcha de Mateo Alemany. 'Bunkerizarse', encerrarse, no va a resolver las renovaciones de Ferran Torres, Kangin Lee, Carlos Soler o la de Garay. Ni tampoco va a evitar que hablemos de ellas o de si el nuevo estadio se acaba ya o no se acaba. Ni siquiera acallará las críticas de Mestalla.
Feliz semana de Champions, de fútbol que es lo que veraderamente me apasiona. Me dejo en el tintero esta vez la valiosísima victoria en Cornellà o la importancia de ganar al Lille.
Hace tres años, en los peores momentos de Meriton, cuando Gary Neville y compañía campaban a sus anchas, el club ya trató de encerrarse como ahora. Siempre es lo mismo, a mí no me sorprende. Al final la culpa parece que la tiene el mensajero y no el ejecutor. Craso error. Cuando las cosas empeoraron, deportivamente hablando, que es lo único que en el fondo me interesa, tocó echar el freno de mano. Ni antes, ni ahora, cambia en el fondo nada.
Un servidor, cuando está en un mar de confusión, lo que suele hacer es dar dos pasos o tres atrás y volver al inicio para reafirmar tres o cuatro principios básicos sobre los que reflexionar de nuevo. En mi caso son los siguientes: la mayoría accionarial del Valencia es de Peter Lim que puede hacer lo que quiera, pero que no puede vivir ajeno a su afición, al sentir de la sociedad civil que lo alberga ni a las reglas del juego futbolístico en el que participa. Y en ese ecosistema está la prensa que contará antes, ahora y siempre lo que sucede, le guste más o menos a Peter Lim y, al menos así lo procuro yo, desde el respeto que todos merecemos. Feliz semana de Champions, que es lo que veraderamente me apasiona. Me dejo en el tintero esta vez la valiosísima victoria en Cornellà o la importancia de ganar al Lille.
David Torres
Delegado de ElDesmarque en Valencia
