Colocan al Valencia tras Oliveira, el jugador que desató el despido de Gattuso en la Fiorentina
El 'huracán Gattuso' ha llegado a Valencia y los nombres de posibles fichajes con los que se han relacionado al club se suceden. Sergio Oliveira, un nuevo centrocampista portugués de la órbita de Jorge Mendes, podría llegar a la capital del Turia. No sería nada extraño, ya que el agente ha intervenido en las incorporaciones de Thierry Correia y Guedes, y más recientemente en la de Helder Costa.
No obstante, el Valencia tendría que pelear con el Wolverhampton para traerse al jugador a LaLiga Santander, según el diario portugués Jornal de Notícias. También afirman desde el país luso que la Roma de Mourinho no está dispuesta a abonar la opción de compra de 13,5 millones de euros al Porto para cerrar su cesión. Sergio Oliveira fue una de las exigencias de Gattuso a su llegada a la Fiorentina y uno de los motivos por los que se precipitó su salida.
A sus 30 años, su fichaje nunca estaría por debajo de los dos dígitos y en la capital del Turia, si bien es cierto que por el momento solo hay un interés, antes deberían vender para llevarse al reciente campeón de la UEFA Conference League.
El último despido de Gattuso antes de llegar a Valencia
Ahora bien, Gattuso es un entrenador con carácter y así lo demostró hace justo un año. Fichó por la Fiorentina el 25 de mayo y apenas aguantó hasta la tercera semana de junio: 25 días para ser concretos. Una de las condiciones que puso el italiano para firmar fue que se hiciera una revolución en la plantilla fichando varios jugadores de nivel para ser titulares.
Desde el conjunto 'viola' le dieron el visto bueno, pero con el paso de los días se encontraron con que todos los jugadores que quería eran representados por Jorge Mendes. Ahí fue cuando llegaron las discrepancias por fichajes como el de Gonçalo Guedes que acabaron haciendo que rescindiera el contrato. La bomba, cuando dijo basta la propiedad, fue cuando los costes del fichaje de Sergio Oliveira se duplicaron por las comisiones. A partir de ahí, hubo unos días de tensión y silencio hasta su marcha definitiva.