Maxi Gómez y una historia de amor con el gol que no fructificó en el Valencia CF
El internacional uruguayo Maxi Gómez ha sido traspasado por el Valencia CF al Trabzonspor turco tras haber completado tres temporadas en el club de Mestalla, donde nunca estuvo a la altura de lo esperado como goleador en el momento de su contratación, justificada por una etapa de dos campañas en las que sí rindió a un muy buen nivel en el Celta de Vigo.
Maxi llegó a España hace cinco años, en 2017, procedente del Defensor de su país para debutar con 21 años en el club gallego, en el que militó dos campañas antes de ser traspasado al Valencia en el verano de 2019.
Los números de las temporadas en uno y otro club reflejan las diferencias entre su rendimiento, ya que en Vigo disputó en dos años 71 encuentros de LaLiga Santander en los que acumuló 31 tantos (dieciocho el primer año y trece el segundo), lo que supuso una media de 0,43 tantos por encuentro.
Desde su llegada a Mestalla, en tres años a los que se suman su participación en los tres primeros encuentros del actual campeonato, Maxi Gómez completa una serie de 96 partidos con un balance global de veintidós tantos (diez, siete, cinco y sin marcar este año, respectivamente).
Estos registros suponen una media por encuentro de 0,22 tantos por choque, lo que reduce prácticamente a la mitad su potencial ofensivo respecto al ofrecido en su anterior club y refleja que en su peor año en Balaídos ofrece cifras más satisfactorias que en el mejor en Mestalla.
Sobre Maxi Gómez
El gol era la única exigencia que a su llegada a Valencia se planteaba a un jugador de sus características, potente en el juego aéreo y destinado a rematar balones, ya que nadie le podía exigir que participara en otras facetas del juego.
En aquello para lo que había sido contratado no llegó a cuajar. Explotó menos de lo esperado dentro del área. Otra de las tareas que le encomendaron todos los entrenadores con los que ha trabajado en Valencia ha sido la de bajar el balón en los envíos largos del guardameta o de algún defensa.
Tampoco brilló en esta faceta del juego, pues fueron más las veces que no resolvió con éxito la misión que aquellas en las que obtuvo el objetivo. Frecuentes fueron las acciones en las que las pugnas con el defensor que le marcaba acabaron en falta por su parte y en muchas de ellas el atacante uruguayo se llevó una cartulina amarilla.
Su paso por el Valencia como “9” de referencia no ha cubierto las expectativas, aunque lo cierto es que el futbolista no ha estado en el club en un momento especialmente bueno para el equipo.
Las tres últimas temporadas del Valencia en la Liga española han resultado mediocres y la única duda que queda en cuanto a Maxi es la de si su juego no ha contribuido a que el Valencia fuera mejor o si, por el contrario, han sido las carencias del equipo las que le han impedido destacar. Probablemente, ambas circunstancias han coincidido.