Thierry sigue creciendo en un partido de extremos: del 1-1 a expulsar a Braithwaite

Thierry Correia es un seguro. Ya no es ninguna novedad y lo demuestra siempre o casi siempre que compite con el Valencia CF. Pues hoy, después de un parón en el que el lateral luso se sinceró, abrió su corazón en una entrevista en este parón internacional, cuajó un partido de extremos. Sobrio e incluso con una superioridad insultante en cada duelo físico sí, pero poco participativo en ataque y blando en la acción del empate de Joselu. Incluso pudo llegar a ser protagonista negativo si el árbitro llega a señalar un posible penalti por tapar con el brazo un disparo de Braithwaite.

Así, el partido del de Amadora ante los pericos fue en la línea del equipo. Impreciso con el balón, a veces. Poco expeditivo en momentos puntuales de la avalancha perica tras el empate y puntual. Por ejemplo, para provocar la roja a Braithwaite que igualó a diez a cada equipo y sirvió para el último arreón de los visitantes que propició, a la postre, el empate.

La experiencia que le faltaba ahora la disimula

A sus 23 años, Thierry es todo músculo y un baluarte defensivo desde la banda. En un equipo joven que se dejó llevar ante el apretón del RCD Espanyol, Correia sufrió. Incluso en el tanto del empate, Joselu se escondió a su espalda y el portugués se quedó muy lejos para tapar el disparo. Sin embargo, esa falta de oficio que brilla por su ausencia en los de Gattuso la suple rehaciéndose. Ese espíritu lo encarna el lateral, que en una de sus incorporaciones por banda, provocó la expulsión de Braithwaite en el minuto 90. Thierry dio el balón de oxígeno para un Valencia que consiguió empatar y pudo incluso ganar en la última de Kluivert.

Su partido confirma que sus peores momentos han pasado. “En mi primer año aquí tuve que recurrir a un mental coach. Salía de entrenar y me ponía a llorar en el coche. Menos mal que tuve cerca a Gonçalo (Guedes) y Rubén (Vezo). Si no es por ellos, no hubiera seguido en Valencia”, reconocía en una entrevista en la SER Deportivos Valencia esta pasada semana. “Sufrí mucho en mis primeros partidos contra Getafe y Osasuna. Me faltaba experiencia. Sentía que no quería estar en el campo. Lo pasaba muy mal”, decía. Ahora no sólo sigue en el campo, sino que lidera la reacción. 

El futuro de Thierry: se ve como capitán algún día

En el Valencia sigue habiendo jerarquías y Thierry Correia juega al lado de Paulista. En una de tantas acciones en las que el Valencia pecó de falta de intensidad sacando el balón, se llevó la reprimenda del '5'. Símbolo de que lo de la capitanía es algo que requiere de muchas ausencia entre los habituales de Gattuso.

Según comentó el jugador en la mencionada entrevista sólo se ve de blanquinegro defendiendo los colores del conjunto Mestalla. “Me hace ilusión ser capitán pero tengo mucha gente por delante: José, Gabi, Lato, Jaume, Diakha, Hugo... y yo. No tengo prisa, tengo contrato hasta 2026”. Lo explicó con pelos y señales y con la sonrisa del que ha superado momentos difíciles y cumple su cuarta temporada en el Valencia CF. Con todo, el Valencia CF lo tiene atado con un contrato hasta 2026 y 100 millones de cláusula. “Hablo con mi padre y se lo digo. ¿Dónde voy a estar mejor que aquí? Jugué Champions contra el Ajax y quiero volver a jugarla con el Valencia", asegura.