¿Quién es, realmente, Antonio Cotán Pérez?

En el preciso instante en el que Miguel Ángel Gómez comenzó a sonar como una opción para sustituir a Braulio Vázquez y ser el nuevo director deportivo del Real Valladolid, las primeras quinielas se centraron a mirar en la plantilla hispalense qué jugadores podían ser futuribles para el equipo blanquivioleta. Se buscaba, entre primer plantilla y filial, determinados futbolistas que cumplieron el perfil de llegar a Valladolid junto a Gómez. Uno de ellos, posiblemente, era Antonio Jesús Cotán Perez (Olivares - Sevilla -, 19/09/1995). Este centrocampista ofensivo del Sevilla Atlético se resumía como un nombre ambicioso que podía cambiar de aires junto a Miguel Ángel Gómez, como así se ha confirmado este martes.

El futbolista, como adelantaba ElDesmarque Valladolid el 18 de julio, era una de las opciones para reforzar el centro del campo blanquivioleta y tras unas exigentes negociaciones con el Sevilla FC, el jugador llega al Nuevo Estadio José Zorrilla para las dos próximas campañas. En ese vínculo con el Pucela, el equipo andaluz, y tal y como anuncia el Real Valladolid en su web "contempla que la entidad hispalense disponga de un derecho de tanteo sobre las ofertas que puedan llegar a Zorrilla sobre este joven jugador".

Precoz y talentoso

En apenas 42 días, Antonio Cotán cumplirá 22 años. Lo hará vestido de blanquivioleta y, quién sabe, si con un puesto importante en el equipo de Luis César Sampedro. Llega para tal objetivo un jugador que lo ha vivido todo en el fútbol y que siempre ha sido importante en los esquemas de sus equipos. A la impagable sensación de firmar un ascenso, el nuevo jugador pucelano ha cumplido todas las fases de crecimiento en el Sevilla Fútbol Club. Con la única espina de no haberse asentado en la primera plantilla hispalense, objetivo que aún queda en el aire, Cotán ha sido indiscutible para los objetivos del filial y una gran apuesta del primer equipo en muchas fases de las temporadas.
Con minutos en Primera División y en competiciones europeas, la carrera del centrocampista dio un cambio importante en 2011. Antes de llegar al filial sevillista tuvo una gran oferta desde Inglaterra. El Liverpool FC quería apostar por él, pero la entidad andaluza no dejaría escapar a una de sus grandes promesas. Le renovó, le cuidó, le blindó y comenzó a potenciarle en el terreno de juego. Una apuesta que el jugador no rechazó y que aprovechó desde los 17 años para terminar siendo uno de los capitanes del filial en Segunda División.
Participando en cuatro temporadas con el Sevilla Atlético en Segunda División B, Cotán era un fijo de los entrenamientos del primer equipo. Unai Emery, desde su llegada, no le perdía la pista y le tenía presente en sus planes y sesiones. Tanto fue así que el 8 de agosto de 2013, en la previa de la Europa League 2014, Cotán disputaría 45 minutos en su primer partido con el primer equipo. Comenzaba su etapa con los 'mayores'. La precocidad del jugador llamaba la atención, pero su calidad y lectura del juego lo cubría todo. Mientras crecía en competición con el filial, vivía constantes llamadas con el primer equipo. Su sueño parecía estar cerca pero, en esta ocasión, su talento no pudo con la elevada competencia de un equipo y un proyecto como el del Sevilla FC y toma al Real Valladolid como su primera oportunidad profesional. Su gran trampolín.

Cuestión de ambición

La llegada de Antonio Cotán al Real Valladolid se puede asemejar mucho a la salida de Toni Villa la pasada campaña a la Cultural y Deportiva Leonesa. Sin hueco en el primer equipo blanquivioleta, el murciano se marchaba al conjunto de Rubén de la Barrera. La necesidad de nuevos retos, el carácter ambicioso del jugador y la sensación de que su etapa de formación había terminado marcaron la salida de Toni hace un año y de Antonio Cotán en la actualidad. Tras cinco campañas en el filial hispalense pero, sobre todo, tras vivir un ascenso a LaLiga 1|2|3 y una meritoria salvación en la categoría de plata, el de Olivares sentía que su etapa en Sevilla había terminado de no tener un hueco en el primer equipo.

Esa opción de dar el salto a la élite no llega por el momento y sin ella, la etapa hispalense había terminado. Un movimiento igual que el de Toni. Para jugar en una misma categoría entre un equipo filial, que trabaja la competición y la formación, y una opción de un conjunto ambicioso y con objetivos de ascenso, no hay color. Toni eligió bien hace un año y Antonio Cotán ha cumplido el mismo camino este verano. Ahora sólo queda que el final de la historia sea igual para ambos jugadores. Toni ya tuvo su ascenso y su premio tras el cambio de aires. Ahora, Cotán debera ganárselo de blanquivioleta.