Una maldición que continuará, al menos, una temporada más
-
Mendizorroza, una muesca que tendrá que seguir esperando
-
Unzué: "No nos pueden hacer un gol tan fácil"
-
Aspas: "Hemos salido atontados"
Por algún motivo, muchas veces intangible hay campos y estadios donde un equipo se atasca. No importa la temporada, ni el nivel de los jugadores, si uno viene de una buena dinámica o no. Esto le sucede al Celta en Mendizorroza, con el de este sábado ya son diez las visitas a Vitoria en la máxima categoría, y los números son deplorables.
Diez encuentros, donde el Celta, ante un rival que sobre el papel casi siempre es inferior, sólo ha sumado tres puntos fruto de tres empates. Desde el 4 de mayo de 2003, el Celta no sabe lo que es sumar un punto en Vitoria en Primera, un empate sin goles.
Los otros dos resultados positivos son anteriores, en el 2001, una igualada a dos goles lograda en el tramo final gracias a Edú y Mostovoi y otro empate en el 2000, donde el Celta se había adelantado con un gol de McCarthy para que Javi Moreno pusiese la iguala en la segunda mitad.
Los otros siete partidos se saldan con derrotas, estas dos últimas temporadas con un 2-1, el de este sábado, y un 3-1 en contra. El Celta ha encajado 17 goles en Mendizorroza, siendo el resultado más abultado un 5-1 en la temporada 1955/56. Por contra, con el tanto logrado por Aspas, sólo suma seis goles a favor.
En Segunda División los vigueses si han logrado vencer al Alavés en Vitoria, pero lo cierto es que los resultados siguen siendo favorables para los vitorianos, de 14 encuentros ha ganado cuatro y empatado otros cuatro. En la categoría de plata los celestes suman un gol más que los babazorros, 16 por 15.
También en Copa del Rey, con tres partidos que se saldaron con una victoria, un empate y una derrota el Celta ha logrado mejorar los números que presenta en Primera. La maldición continuará, al menos, una temporada más, porque la realidad es que los vigueses en la máxima categoría han convertido Mendizorroza en un campo maldito.