Escribá: "La exigencia es llegar muertos al final del partido"
El entrenador del Celta de Vigo, Fran Escribá, señaló que su equipo debe encarar el choque de este sábado contra el Villarreal como si fuese "una final", y apuntó que su "exigencia" es que sus futbolistas lleguen "muertos" al final del partido.
"Final como decisivo no es porque quedan puntos suficientes para que pueda ocurrir algo diferente, independientemente del resultado de mañana, pero sí quiero que la mentalidad sea esa. Quiero mentalidad de que nos quedan diez campeonatos de una jornada, diez finales", apuntó el preparador celeste en rueda de prensa.
"En un partido en el que vamos a estar tan exigidos, lo normal es llegar muertos al final. Y eso lo que quiero. Lo que un entrenador quiere es que los jugadores no puedan dar un paso más, y eso es lo que tenemos que hacer mañana", agregó.
Escribá no escondió la importancia de ganar al Villarreal porque se asegurarían el "gol-average" particular con un rival directo, y cree que sus jugadores deben aprovechar el ambiente que se ha generado.
"Tenemos que aprovechar ese ambiente de estar todos a una, pero también saber gestionar la ansiedad y la tranquilidad. Hay que pensar que son 90 minutos pero siendo intensos desde el primer minuto", apuntó.
El preparador valenciano no quiso dar pistas sobre si Iago Aspas arrancará como titular, insistió en que tanto Olaza como Kevin Vázquez tienen opciones para sustituir al lesionado Juncá y elogió el cambio de actitud del extremo Emre Mor.
"Sabe que tiene que dar más porque ahora hasta ahora no ha dado lo que se esperaba con él. Hablé con el chico y está preparado para ayudar al equipo en este tramo final", puntualizó Escribá, quien no piensa más allá del enfrentamiento contra su ex equipo pese a que disputarán tres partidos en ocho días.
"En los tres partidos voy a sacar el mejor once que yo crea disponible. Lo cual no quiere decir que vayan a jugar los mismos once. No voy a gestionar la alineación en función de tarjetas o de que en cuatro días jugamos en Huesca", avisó.
Recordó el nivel del Villarreal, "al menos la mitad de la plantilla han sido jugadores míos, es una plantilla muy completa", y confesó que no esperaba ver al conjunto amarillo en la zona baja de la tabla.
"De todos los que estamos de mitad de tabla para abajo, su situación era la más impensable porque lleva varios años en Europa. Este equipo en un año normal debería estar luchando por la cuarta posición. Los conozco bien, entrenan bien y son un buen grupo, también a nivel humano. Con Calleja han cambiado de sistema porque antes estaban acostumbrados a jugar con defensa cuatro. Es un equipo que se puede adaptar a cualquier tipo de situación y de rival", concluyó.