El Celta ve "inadmisible" la reforma de Rio Bajo hecha por el ayuntamiento
El Celta de Vigo mostró este miércoles su "profunda preocupación" e "indignación" por la disposición, diseño y tamaño de los asientos que el ayuntamiento de Vigo, propietario del estadio de Balaídos, ha instalado en la grada de Río Bajo, y urge que se subsanen las deficiencias detectadas, las cuales, apunta, afectan "de manera grave" al confort de abonados y aficionados.
El consejo de administración del club gallego considera "inadmisible" que el ayuntamiento intente culpar al club de su "desastrosa" actuación, alegando, apunta el Celta en su comunicado, que presentó el proyecto de reforma en su momento.
"El RC Celta lleva varios años al margen de estas actuaciones, por lo que es intolerable querer achacar al club su propia incapacidad, máxime cuando tiene su alcance corregir su error", denuncia la entidad presidida por Carlos Mouriño, enfrentada desde hace meses al alcalde de la ciudad, Abel Caballero, por la reforma integral de Balaídos y los terrenos para la nueva ciudad deportiva.
El Celta constató que, entre otras deficiencias, el espacio entre las filas de los asientos instalados por el Concello es "total y absolutamente insuficiente" para garantizar la mínima comodidad exigible para los abonados, además de que se ha reducido el número de asientos, obligando al club a reubicar a una "gran cantidad" de abonados, muchos de ellos con "una gran antigüedad".
El club convocó esta mañana, en el estadio, a representantes de las peñas celestes para que pudiesen comprobar por sí mismos el resultado de la actuación del Concello, e informarles sobre las gestiones realizadas por el club para tratar de que se subsanen las deficiencias.