La reacción comienza por romper la tendencia de un estadio maldito
El Celta de Vigo visitará este lunes 25 de noviembre un campo que no trae buenos recuerdos para la escuadra celeste. El Coliseum Alfonso Pérez, el estadio donde juega el Getafe CF, no es el mejor escenario donde iniciar la necesitada reacción liguera. Con seis derrotas en nueve partidos de LaLiga Santander los de Eduardo Coudet necesitan empezar a sumar victorias para alejarse de los puestos de descenso que ocupa su próximo rival, el Getafe. Los azulones, ahora con Quique Sánchez Flores en el banquillo, aún no han ganado en esta temporada y esperan hacerlo ante un Celta que ha caído en seis de las diez visitas que ha hecho en Primera División al Coliseum Alfonso Pérez.
Una decena de partidos en el campo madrileño ha disputado el Celta en la máxima categoría del fútbol español. Casi todos ellos terminaron con malos resultados y pésimos recuerdos para entrenadores como Paco Herrera, destituido tras perder en este estadio. También fueron goleados Miguel Cardoso o Juan Carlos Unzué mientras que Luis Enrique y Eduardo Berizzo vieron como sus equipos eran derrotados por un Getafe que solo cayó como local ante el Celta en una ocasión. El balance goleador es desolador para el Celta ya que solo ha logrado marcar seis tantos por los 16 que ha encajado.
En este pésimo balance solo hay un marcador positivo. Fue en la temporada 2015/16 cuando un solitario gol de Nolito sirvió para que el Celta venciese en el Coliseum Alfonso Pérez. El tanto del gaditano, en la segunda mitad, permitió al equipo comandado por el Toto Berizzo alzarse con la única victoria celeste en LaLiga Santander en este complicado estadio. La tendencia, siempre negativa, ha ido mejorando en las dos últimas temporadas.
Tanto Óscar García como Eduardo Coudet lograron que sus equipos sumasen al menos un punto en Getafe. El catalán logró un 1-1 mientras el argentino se llevó un 0-0 del Coliseum Alfonso Pérez. Dos resultados que, en el actual curso, no ayudarían al Celta a salir de la zona baja de la clasificación pero que al menos dejarían a los de Quique Sánchez Flores cinco puntos por debajo.