Un día especial para Unai Núñez: "De donde yo soy ante mi mejor amigo"
Este jueves se enfrentarán sobre el césped de Urbierta Antonio Salado y Unai Núñez. Los dos futbolistas, del Gernika y Celta de Vigo, son amigos, los mejores, desde niños. Incluso bromean que ya lo eran al nacer ya que sus dos madres coincidieron en el hospital ya que solo se llevan un día de diferencia. Recordaba el centrocampista que él nació un 29 de enero y Unai Núñez el 30. Para ambos el duelo de la Copa del Rey es especial ya que desde alevines se formaron en la cantera del Athletic Club. Este jueves en Urbieta dejarán de lado su amistad para abrazarse al acabar el partido y cambiarse las camisetas.
Bromeaba Antonio Salado en una charla grabada por el Celta que había conseguido "entradas para todos" en un partido "para el recuerdo". Una charla en la que también apareció Óscar Mingueza que confesó que Unai Núñez ya le había dicho al resto de la plantilla del Celta lo especial que sería poder jugar contra su mejor amigo.
Antonio Salado recordó como siguió el sorteo de la Copa del Rey con el resto del Gernika. Cuando se enteró que le tocaba medirse al Celta reconoció que "fue una alegría que no esperaba". Unai está feliz porque "me toca jugar en un pueblo de donde yo soy" ante "mi mejor amigo". Un partido donde toda su "cuadrilla" tendrá el corazón dividido porque será la primera vez que se enfrenten en distintos equipos en un partido oficial.
"𝑆𝑜𝑚𝑜𝑠 𝑎𝑚𝑖𝑔𝑜𝑠 𝑐𝑎𝑠𝑖 𝑑𝑒𝑠𝑑𝑒 𝑛𝑎𝑐𝑒𝑟, 𝑝𝑜𝑟𝑞𝑢𝑒 𝑛𝑢𝑒𝑠𝑡𝑟𝑎𝑠 𝑚𝑎𝑑𝑟𝑒𝑠 𝑐𝑜𝑖𝑛𝑐𝑖𝑑𝑖𝑒𝑟𝑜𝑛 𝑒𝑛 𝑒𝑙 ℎ𝑜𝑠𝑝𝑖𝑡𝑎𝑙"
El #GernikaCelta es un partido especial para @unainunez30 y @AntonioSalado97 🤝
💙Amigos íntimos pero... este jueves rivales pic.twitter.com/CR6U4GFfy6
— RC Celta (@RCCelta) December 20, 2022
"Unos vacilan que van con el Gernika y otros vacilan con que van con el Celta", señaló Unai. Salado recordó que desde alevines a juveniles estuvieron siempre juntos. En ese momento Unai Núñez subió una categoría más. También recordaba el centrocampista del Gernika que "yo en el campo lo evitaba mucho" porque "físicamente me pasaba por encima". El central celeste apuntó que su amigo "tiene mucha calidad, una zurdita muy buena, así que tenía que usar mi cuerpo".
"Fuera del campo tenemos mil anécdotas pero que se puedan contar pocas", confesó Salado que dejó claro que a partir de este miércoles "no somos amigos". "Hasta que pite el árbitro ni nos miraremos. Luego nos cambiaremos la camiseta y si te dejan nos quedamos a cenar" en un partido "para que disfrute toda la familia".