Expediente X con las lesiones del Real Zaragoza

El amplio historial de lesionados, extrañas dolencias que aparecen de la nada, diagnósticos que cambian más de la cuenta, recuperaciones que se alargan, secretismo oficial, diferentes versiones… ¿Se está viviendo un Expediente X con las lesiones del Real Zaragoza? La lesión de Cabrera, después de retirarse del campo expulsado, colma el vaso de una racha de casos extraños con la enfermería en el equipo aragonés.

 
El último parte médico sobre Leandro Cabrera deja al descubierto el despropósito que se vive en este departamento del club. El jugador se perdió dos partidos por una entesopatía interseccional en el aductor de la pierna izquierda y jugó con absoluta normalidad los  27 minutos antes de ser expulsado ante el Girona. El uruguayo entrenó el lunes con el grupo y al final del entreno se avisó de esta nueva y sorprendente dolencia ¿Cuándo se la hizo? Si avisó, ¿quién no le hizo caso? El jugador se encuentra bastante molesto y el periodo de baja no será inferior a las cuatro semanas.
El jefe de los servicios médicos es Honorio Martínez, que lleva una temporada y media desde que se decidió parar la entrada y salida de profesionales en este puesto (Villanueva, Cremallet, Jarabo…) El lío es claro y el director deportivo, Narcís Juliá mantuvo una reunión con todos los interesados hace un mes para intentar poner cordura en un departamento tan importante y en el que parece haber también demasiada presión por parte de algún dirigente.
La lista de casos extraños comienza a ser evidente con una lesión de Jaime Romero, antes de romperse los ligamentos de su rodilla, en la que pareció adelantarse su incorporación a la competición y en la que algunas voces dentro de la entidad pedían una prueba antes de haber dado el visto bueno para que jugase el partido.
La discrepancia que más ruido hizo fue la lesión de Pedro. En un principio, se habló de una sobrecarga en el psoas. El jugador se quejaba de más molestias y el club no encontraba nada en las pruebas que se le realizaban. Se habló de un problema inguinal y se le concedió permiso para que fuera a un médico de su confianza. Nunca se supo con exactitud porque estuvo tantas semanas en el dique seco.
Otro caso que fue muy sonado fue el de Pape Diamanka. El jugador se lesionó en el partido de la primera vuelta ante el Alcorcón, permanece un par de semanas de baja y se fuerza su concurso ante la Ponferradina. El centrocampista se nota cargado, pero al descanso se decide que juega y acaba rompiéndose los isquios en el minuto 50. Nadie asumió la responsabilidad.
No hay que olvidarse tampoco del caso de Bono. El guardameta estuvo sin entrenar un par de semanas y el club no emitió ningún parte oficial. El jugador comentó a su entorno que se había hecho pruebas y que había rotura de fibras. Nunca se supo la exactitud de esa lesión.
La temporada de Marc Bertrán no pasa desapercibida. Se rompió ante el Oviedo y tampoco hubo parte médico. Al parecer se rompió en la readaptación. A principios de enero se habla de una nueva lesión en el sóleo y antes de reaparecer vuelve a recaer el pasado 3 de marzo.
Manu Herrera también vivió una extraña lesión desde la pretemporada en la que su gravedad tenía varias versiones dependiendo de con quien se hablase.