Los deseos de cada Año Nuevo
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El 2017 hace sangre en el zaragocismo
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El 2017 del Real Zaragoza, en imágenes
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El mercado marca el 2017 en ElDesmarque Zaragoza
El Real Zaragoza se presenta al 2018 con el mismo reto que comenzó el 2014 y todos los años que han venido, tras consumar el descenso a Segunda División varios meses antes: subir a Primera. El deseo de todo el zaragocismo y el propósito de jugadores, cuerpo técnico y club. Muchas cosas han cambiado desde entonces, pero el objetivo continúa siendo el mismo, el repetido hasta la saciedad por parte de la institución y su afición en cada copa de cava al alza para estas fechas.
Pero subir a la máxima categoría del fútbol español pasa por sacar adelante recovecos del día a día. Uno de ellos es ser fuertes en La Romareda. Algo que, desde luego, el Zaragoza del 2017 no ha logrado conseguir. Los maños solo han ganado cuatro partidos en casa este año. Al Numancia con 3-0 en dos ocasiones, Mallorca por la mínima y Rayo Vallecano en el mes de noviembre. El resto de encuentros disputados como locales se reparten en nueve empates y ocho derrotas.
En el deseo común también juega un papel importante la estabilidad económica. A pesar de la gran deuda que todavía colea, se ha conseguido reducir 23,3 millones de ella en las últimas tres temporadas. Por su parte, el club aragonés presentó un superávit de 1,1 millones de euros. Lo dijo Javier Tebas, presidente de LaLiga Santander: “El Zaragoza es un equipo de Champions en gestión”. Así pues, se trata de uno de los aspectos más positivos del año. El deseo es mantener esa dinámica desde las oficinas, para ir salvando al club de la quiebra temporada tras temporada. Va saliendo el Sol.
2017 ha sido nefasto deportivamente, pero ya está finiquitado. El discurso es el de todos los años, hay que olvidar e intentar arrancar el 2018 con buen pie, con ganas y esperanza. El deseo del capitán Zapater es tener salud. Sus compañeros van por el mismo camino. Fundamental para volver pronto al pedestal de donde no se debió bajar. Una vez sanos, las aspiraciones son muchas. Jugar bien, ganar, competir, llenar La Romareda, cuidar la cantera, llenar la cartera… Mucho que pedir, pero solo algo que alcanzar, volver. Volver a Primera División, volver a Europa, volver a dar guerra en Copa del Rey y levantarla, volver a ilusionar, a emocionar, a enganchar... Y por encima de todo, tener un feliz año.