Justin Gatlin acusa a Pekín de impedirle correr
El velocista estadounidense de 33 años Justin Gatlin, que el pasado fin de semana batió su marca personal en 100 metros en Doha y tenía previsto mañana volver a correr en el Mitin de la IAAF de Pekín, acusó hoy a los organizadores de impedirle participar y abandonó la ciudad con un enorme enfado.
"No tienen ningún respeto hacia mí, así que me dijeron que era mejor que me fuera, me echaron", declaró un iracundo Gatlin a un grupo de periodistas en el aeropuerto de Pekín, poco antes de volar con destino a Estados Unidos.
El corredor había llegado el sábado a Pekín directamente desde Doha tras su éxito en la Liga de Diamante y con la intención de participar en el mitin de la capital china, pese a haber manifestado algunas dudas sobre su estado físico tras un largo vuelo.
"Es una locura, no tengo ni idea de lo que estaban pensando", afirmó el corredor, cuyo entrenador afirma que los organizadores le notificaron la expulsión de la carrera a través de un mensaje vía móvil.
Ni la organización de Pekín -ciudad que este verano acoge los Mundiales de Atletismo- ni la IAAF han confirmado públicamente la expulsión del atleta, y su nombre todavía aparece en la lista de participantes de la carrera de mañana, donde Gatlin hubiera defendido el título logrado hace un año.
Gatlin consiguió el pasado viernes recorrer el hectómetro en 9:74, el mejor tiempo de su vida.
El corredor fue oro en los 100 metros de los Juegos de Atenas 2004 y en los Mundiales de Helsinki el año siguiente, aunque protagonizó un escándalo de dopaje que le apartó de las pistas entre 2006 y 2010 y le ha convertido en una figura controvertida del deporte.
El preparador de Gatlin afirmó que pedirán a los organizadores chinos que paguen los costes de vuelo y alojamiento estos días en Pekín, por valor de unos 12.000 dólares.