Ecuador basó en su buen fútbol el pase a cuartos y el sueño de la semifinal

La selección ecuatoriana alcanzó los cuartos de final de la Copa América gracias al fútbol mostrado en los tres encuentros que ha disputado y en la buena combinación entre ataque y defensa, por lo que está abierta al sueño de alcanzar la semifinal, para lo que debe eliminar a Estados Unidos.Alfonso Gil
El equipo que dirige el argentino nacionalizado boliviano Gustavo Quinteros ha dado una imagen sólida en el tramo inicial del torneo con la única excepción de la "pájara" de los primeros minutos del partido ante Perú, en el que recibió los dos únicos tantos que le han metido hasta la fecha.
La percepción de que Ecuador estaba llamado a completar una buena Copa quedó patente en la solidez de su fútbol en el encuentro inicial con el potente equipo brasileño, favorito a priori para ser primero del grupo.
El empate a cero final demostró esa consistencia en un encuentro en el que gol injustamente anulado a Ecuador tras un error arbitral pudo haberle dado una importantísima victoria ante los potentes brasileños.
Llegaba a continuación el partido que se suponía decisivo ante Perú. Nadie se planteaba la posibilidad de que Brasil quedara fuera de los cuartos como finalmente ha ocurrido, por lo que además de no fallar ante Haití en la jornada final, resultaba imprescindible sacar adelante el choque ante los peruanos.
Muy mal empezaron las cosas en ese encuentro, ya que en el minuto 15, el rival ganaba por 2-0. No importó. El equipo de Quinteros se rehizo, logró marcar ante del descanso y empatar al comienzo de la reanudación de un partido en el que en el segundo tiempo cercó a Perú, pero no consiguió pasar del empate.
Solo quedaba, por tanto, ganar o ganar a Haití para garantizar la clasificación. Los jugadores ecuatorianos demostraron su solidez con un dominio absoluto y un contundente 4-0 final y lograron el objetivo.
Por lo que a sus futbolistas se refiere, la consistencia defensiva se ha combinado con la capacidad en ataque de un equipo en el que Enner Valencia ha sido su referente ofensivo no solo por los dos goles que ha obtenido, sino por su participación y generosidad en otras acciones, como la del gol que regaló a su compañero Jaime Ayoví ante Haití.
Jefferson Montero, en su posición de extremo izquierdo, se ha convertido en un problema para las defensas rivales por sus constantes regates y Miller Bolaños también tuvo una aportación importante cuando jugó.
La calidad de Antonio Valencia, la lucha y el espíritu de sacrificio de Cristian Noboa y la solidez de los centrales también han dado al equipo ecuatoriano argumentos suficientes para que el paso dado sea consecuencia de los merecimientos del equipo.
Con el fútbol desplegado, Ecuador ha llegado a los cuartos de final del torneo, algo que no conseguía desde hace diecinueve años y tiene por delante un partido ante un rival que, sin ser sencillo, no es de los más complicados de entre los que se podía tropezar en esta instancia del torneo.
Estados Unidos, el anfitrión de la Copa, será su oponente este jueves en Seattle, la ciudad más noroccidental de las que acogen el partidos de la Copa, un lugar en el que el fútbol está más asentado que en otros lugares del país.
Esto hace pensar en que el anfitrión ejercerá verdaderamente como tal al contar con el apoyo mayoritario de la afición que se congregue en el estadio CenturyLink Field.