¿Un torneo con peleas de 'hooligans'?
Reportar vídeo
Por favor, indica por qué quieres reportar este vídeo:
El diputado ruso Igor Lebedev, del partido de extrema derecha LDPR ha propuesto la creación de un torneo, a semejanza de un Europeo o Mundial de naciones, con 'hooligans' enfrentándose entre sí, con el reflejo de lo visto durante la pasada Euro de Francia.
"Los aficionados ingleses llegan, por ejemplo, y empiezan los altercados. Nosotros les respondemos: desafío aceptado, nos vemos en el estadio a tal hora", comenta Lebedev, antes de finalizar reclamando la normalización de los combates, como forma de canalizar la ira de los ultras. No creemos que la idea tenga futuro por aquello de la decencia y el sentido común, pero si nos atrevemos a nombrar algunos de los países que serían favoritos en la cita.
Los rusos serían los grandes favoritos. Durante la Euro de Francia ya demostraron de lo que son capaces, y arrancarían el torneo como los rivales a batir.
Los ingleses completarían el gran clásico de la competición junto a los rusos. Los 'hooligans' ingleses son los de mayor tradición, y le darían al torneo un toque de nostalgia.
Si el Rusia-Inglaterra sería el clásico del torneo, los rusos vivirían con Ucrania el 'Derbi de Crimea', de gran tensión debido a la Guerra que mantienen rusos y ucranianos en la zona anexionada por Rusia.
Los ultras polacos no entienden de amiguismos y van contra todos. Tanto rusos como ucranianos se las han tenido que ver en algún momento con ellos.
Los alemanes son otros de los clásicos. También poseen un historial potente a sus espaldas que impide dejarlos fuera de la terna de favoritos.
Hungría, después de muchos años fuera de los torneos internacionales, demostró en la Euro 2016 que sus ultras han estado preparándose durante todo este tiempo de inactividad.
El Croacia-República Checa de la Euro 2016 se tuvo que suspender momentáneamente debido al lanzamiento de bengalas por parte de los croatas, con los Bad Blue Boys y la Torcida Split uniendo fuerzas.
Si Croacia está presente, no puede faltar Serbia, rememorando los tiempos de la antigua Yugoslavia. Los Grobari y los Delije llevan años de experiencia a sus espaldas.
