[Review] Juego de Tronos: 5x09 "Danza de Dragones"
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Y el noveno es un octavo. Así perfectamente podría continuar la sucesión de titulares de los dos últimos episodios de Juego de Tronos, del noveno al octavo a falta de una season finale a la que sólo le queda una guerra por mostrarnos en Invernalia. Y es que, si el anterior episodio fue redondo, este 5x09 se queda algo atascado dentro de una espectacularidad abismal, porque sí, HBO sigue demostrando que juega en otra liga y por eso hay que exigirle más. Dorne y Braavos se atragantan, el Norte sorprende y Meereen se convierte en el epicentro del éxtasis que muchos ansiábamos desde que ciertos huevos llegaron a las manos de cierta madre de dragones.
De menos a más
El Muro volvió a abrir sus puertas no sin dudas tras la llegada de Jon Snow con un ejército que dejaba por momentos de serlo. Salvajes y Cuervos entraban juntos ante la atónita mirada del resto de compañeros de la Guardia de la Noche. La mirada esquiva, cansada, dubitativa de Jon Snow es el mejor resumen de una escena que apenas tiene conversación.Alliser Thorne pone el punto de tensión en la llegada de Snow y después de tomar la decisión de abrir las puertas, lo golpea sutilmente con la palabra:
Thorne: "Tenéis un buen corazón Jon Snow, pero harás que nos maten a todos".
La lógica hace que el final del octavo episodio arrastre directamente a los cuervos a este inicio, punta de lanza que bien podría estar cerrada en el final de la primera temporada si no fuera por una petición, la de Stannis a Davos. Y es que como bien dice el dicho, 'No cuervos no party'. Sí, cosecha propia.
El Juego de Tronos: dirección Invernalia
El campamento de Stannis no tiene más fin que la magia negra para sobrevivir tras el ataque de lo que bien podría ser una película de terror, Los veinte de Ramsay. El ataque inesperado de los Bolton deja con las manos atadas al eterno rey, que toma una decisión que concluye en una de las muertes más duras en Juego de Tronos.
Ante todo Stannis es un tipo inteligente y de ahí que su primera decisión, ante el paternalismo de Davos con la princesa Shireen, es mandar a su mano del rey al muro para obtener fuerzas de los cuervos y así afrontar la toma de Invernalia con más poder. O lo que es lo mismo, tener libertad para poder asesinar a su propia hija.
Me encanta este momento por su significado, porque muestra de lo que es y seguirá siendo capaz HBO, de mostrarlo absolutamente todo, los tienen enormes. Un padre que antepone su reinado ante la vida de su propia hija, a la que manda a las sombras de Melissandre ante su propio ejército para sobrevivir quién sabrá cómo.
La doble vía de la Danza de dragones toma fuerza cuando tanto Davos como Stannis, van por separado a visitar a la princesa, que está leyendo el conocido libro de la gran crisis de la dinastía Targaryen. Lucha de hermanos, poder, el trono, dragones...¿suena?
"A veces la gente tiene que elegir, a veces el mundo fuerza la mano...el llegar a ser quien estás destinado a ser, por mucho que lo odie, hacerlo. No sabes ni siquiera de lo que te estoy hablando"
Y así es como Stannis le dijo a su hija que la mataría sin decírselo antes de una de las escenas más espeluznantes de las cinco temporadas. El significado, la fiereza de la niña por sobrevivir, las caras de los soldados, de la madre, la antipatía de la madre de la oscuridad, la impotencia cohibida del 'rey', sin duda lo mejor y más duro de este episodio, que te deja cortada la garganta cuando ves a Melissandre despedazando a fogonazos la sangre regia. El Dios de la oscuridad estará contento allá donde esté.
El detalle, mi sensación, que George R.R. Martin tuvo voz en este episodio. Al menos así me lo dice el instinto cuando Shireen habla por última vez con su padre.
Stannis ¿Por qué Danza de Dragones?
Shireen: "Quizás es algo poético".
¡Zas! Como si el mismísimo Martin gritara y adelantara lo que estaba por llegar, escudando un libro en una antigua novela por el trono, en el fuego de los dragones, en su ciencia ficción, en lo que queda por llegar.
Y de nuevo DornezzzZZzz. El mayor error de esta quinta temporada sigue sin arrancar en el a priori, episodio grande de la serie. Trama aburrida en la que sigue sin pasar nada. Bronn retoma la libertad, le dan de ostias y todo son risas. Jaime recupera a su hija y se lleva a un Martell de camino a Desembarco (o eso parece) y la alianza Martell-Lannister toma fuerza.
Lo mejor, sin duda, Ellaria Arena. Una disculpa entre sollozos que reflejan el pasado y el futuro entre frustración y sangre.
Doran Martell: "Puedes jurarme lealtad ahora, o morir".
Y ella cede, le besa arrastrándose ante las Serpientes de la Arena, todavía arrestadas tras la trifulca de hace miles de años. Quizás algo tenga todavía que explotar, pero da la sensación de que Dorne ha dormido en un sueño profundo a la serie en esta temporada.
Misión fallida, nuevo objetivo
The Thing Man tendrá que esperar para conocer a Dana, porque Arya Stark está más viva que nunca ante la sorprendente llegada a Braavos de Meryn Trant, ese eterno balbuceo de la pequeña Stark repetido en decenas de noches con un sólo pensamiento, el asesinato. Las ostras que la pequeña debía vender se convirtieron en un jugoso manjar para todos menos para su objetivo y es que Arya mantuvo su cara, la que le hizo esconder Aguja en vez de tirarla al mar.
Y de ahí viene todo, de Aguja, la espada con la que Arya aprendió a entrenar junto a Syrio Forel, supuestamente asesinado por Meryn Trant. ¿Y si todos esos nombres se hacen uno en el décimo?
Arya decidió perseguir en su 'nueva misión' las acometidas de Trant hasta el punto de llegar a tenerlo delante, frente a frente. En un prostíbulo en el que se sigue comprobando lo amable que puede llegar a ser Trant, Arya comienza a carburar odio hasta saciarse y volver con una mentira a la Casa de Blanco y Negro. Aquí seguro que volvemos en el décimo, Braavos tiene mucho que contar en el finale.
Y de cierre la danza, lo ineludible, Drogon. El alma de la serie tomó fuerza y ese mismo fuego en el que sobrevivió la madre de los dragones, es el que eleva a la mismísima Daenerys a los cielos de Meereen. Por que sí, a pesar de que el efecto podría mejorarse, Juego de Tronos por fin nos ha mostrado a la reina manejando a sus mascotas, ahora máquinas de matar.
Jorah, Tyrion, la lucha, Los Hijos de la Arpía, las muertes inesperadas, la sola presencia de Dario, todo queda anulado frente a la verdadera protagonista. El apellido Targaryen vuelve a tener significado con una de las escenas más épicas vistas hasta ahora, el combo con doble tirabuzón del siglo, la unión entre Daenerys y Drogon. El vuelo final no es más que una apertura a todo lo que ahora puede llegar, porque el fuego acaba de pronunciarse por encima de todas las batallas ingobernables que ha sufrido durante cinco temporada la Khaleesi. Ahora maneja el fuego, ya se sabe reina, ya puede mirar de reojo a Poniente.