'Ciro' Mertens: leyenda por sorpresa
El gol se paga caro. Por ello, encontrar a un futbolista que sea capaz de asegurarte cierta cantidad de goles sin llegar a desembolsar una gran cantidad de dinero o que al menos la relación entre un aspecto (el económico) y el otro (el rendimiento) esté equilibrada, es un éxito para cualquier club de Europa y del mundo.
Si hablamos de Dries Mertens, el Nápoles cuando en el verano de 2013 lo firma no buscaba en él a un goleador nato. De hecho, ese mismo mercado de fichajes firma a Gonzalo Higuaín procedente del Real Madrid y el argentino durante su etapa en el San Paolo acumula unos números goleadores muy positivos.
Mertens, que militaba en el PSV Eindhoven, llegó a Nápoles como un jugador de banda o segundo punta. Poco a poco se fue haciendo un hueco en el equipo partenopeo, pero sólo ante la necesidad -la grave lesión de Milik truncó su gran estado de forma- y como método de emergencia ante la ausencia de un Higuaín que había sido referencia, ya con Sarri en el banquillo, en la temporada 16/17 ocupó la delantera.
Los resultados no pudieron ser mejores y el belga, que no pasaba de los 10 goles por temporada, se fue a los 34 tantos que lo colocaron como uno de los candidatos al Balón de Oro. Anotó goles de todas las facturas posibles y se erigió como referencia de los suyos. ¿Quién diría que sólo habían pagado diez millones de euros por él?
Mertens -con 22 goles la pasada campaña- sigue demostrando que ha encontrado su hábitat en el centro del ataque. Carlo Ancelotti no las tenía todas consigo sobre su demarcación en el campo en la 'revolución' que ha llevado el nuevo técnico al San Paolo, pero ha tenido que acabar claudicando ante la evidencia.
El ex entrenador del Real Madrid utiliza tanto en mayor minutos como en número a todos los futbolistas de los que dispone, algo que se echaba en falta con Sarri a los mandos, y Mertens quizás haya sido el mayor perjudicado por esta decisión.
Llegó lejos con su selección en el pasado Mundial de Rusia, lo cual le hizo descansar poco... y comenzar jugando menos de lo esperado -la mayoría de las veces, partiendo desde el banquillo- pero a base de goles se ha vuelto a abrir hueco en la delantera.
El pasado viernes, ante el Empoli, anotó el primer hattrick de goles desde fuera del área desde que Sinisa Mihajlovic lo hiciera en 1998. Suma 7 en los 11 partidos de Serie A que han jugado los suyos y 98 con el Napoli en todas las competiciones, superando a Careca y Altafini y situándose como el sexto máximo goleador de la historia del club.
No tiene la fisonomía prototípìca de un '9' a la vieja usanza, puesto que no supera el metro setenta de altura y ya ha apagado las 31 velas, pero a Mertens se le siguen cayendo los goles y se ha convertido en ídolo de una ciudad tan pasional como Nápoles que lo ha rebautizado como 'Ciro' -nombre muy común en la ciudad del sur de Italia-.
Mertens ha declarado en más de una ocasión su amor por la ciudad, el club y su afición, lo cual le ha llevado a rechazar ofertas de clubes importantes y generar adoración hacia su figura por las calles de la ciudad por sus gestos y su ganas de adaptarse a una urbe tan carismática como Nápoles.
¿Alcanzará los 120 goles que suma Hamsik y que lo colocan como máximo realizador en la historia del club por delante de Maradona? Parece empeñado en no descansar hasta lograrlo. Nadie podía imaginárselo en el verano de 2013.
Repasa anteriores posts de 'Il CateNacho':
- Kluivert, veinte años más tarde
- Dimarco: héroe, villano y viceversa
¡Y suscríbete al podcast!