Bruno Marioni admitió responsabilidad en sus actos de violencia con Pumas
El argentino Bruno Marioni, entrenador de los Pumas de la UNAM de México, asumió este martes su responsabilidad en los actos de violencia en los que se ha visto envuelto en las últimas dos semanas en el torneo de Liga y Copa.
"He cometido dos errores, estamos todos en un proceso de crecimiento, estoy aprendiendo día con día, no voy a justificar malas actitudes, pero tampoco me voy a martirizar, esto continúa y tengo que seguir creciendo, mejorando y comprometiéndome a no tener situaciones que generen polémica", dijo Marioni.
Marioni, de 43 años, fue expulsado el domingo pasado cuando Pumas derrotó en casa 1-0 a Xolos de Tijuana, al lanzar el balón a un jugador del equipo contrario. La Comisión Disciplinaria de la Federación Mexicana de Fútbol lo sancionó al haber abandonado el área técnica sin autorización del árbitro.
El argentino, exjugador de Pumas con quienes logró el título del Clausura 2004, se perderá el partido de visita del próximo sábado en el estadio Azteca de la Ciudad de México ante Cruz Azul del dirigente portugués Pedro Caixinha.
Antes, el pasado 3 de abril en la semifinal de la Copa MX que Pumas perdió 2-0 de visita con el Juárez, de la liga de Ascenso MX, Marioni se peleó con un aficionado al término del partido.
"Cuando hay situaciones buenas y malas los responsables son todos... en algún momento hemos dejado de hacer cosas, no hay que escaparle a la responsabilidad, entonces seguiremos trabajando para mejorar", dijo el técnico sudamericano.
El brasileño Leandro Augusto, director deportivo de Pumas, dio a conocer el domingo que Marioni se hizo acreedor además a un castigo interno por reiteración del mal comportamiento.
Pumas es duodécimo lugar del torneo Clausura con 16 puntos, a seis de distancia de la zona clasificación que cierran los Xolos del entrenador colombiano Óscar Pareja.
El conjunto universitario está obligado a ganar sus últimos tres encuentros de liga y esperar las derrotas de otros equipos para aspirar a meterse a la fase de liguilla, aunque las posibilidades son remotas.