El Seat Ateca viene con bomba (y no es buena): “¿Sabes lo que le pasa?”

El Seat Ateca es uno de los SUV más vendidos en el mercado español y también una de las estrellas del catálogo de la firma. De tan buena salud goza el SUV mediano de la marca con sede en Martorell que desde Seat no dejan de mejorar ciertos aspectos que en el momento de su lanzamiento se quedaron un poco cortos.

Así, recientemente se implantó el cuadro de instrumentos digital con una pantalla de 10,25 pulgadas, lo que le da un aire mucho más actual a su interior.

Seat mejora el Ateca

Asimismo, se conoce que Seat ha realizado un esfuerzo importante en la mejora de sus motores. Por ejemplo, se han efectuado algunos cambios en el 2.0 TDI 150 CV AdBlue que mejoran su rendimiento y reducen las emisiones.

Ahora este Ateca utiliza un sistema de reducción catalítica SCR con AdBlue. Con la urea se produce una reacción química que extrae el óxido de nitrógeno.

Además, se ha instalado un catalizador de oxidación que transforma las partículas diésel, en elementos no perjudiciales, así como se ha instalado un filtro para eliminar el hollín.

El problema del Seat Ateca

No obstante, los cambios han generado un daño colateral a tener en cuenta si estamos pensando en comprarnos uno. Esto es que este Ateca le cuesta responder en las marchas largas. Hasta las 2.500 rpm no empezamos a notar el genio de este SUV español.

Al margen de ello, el Seat Ateca sigue siendo una buenísima opción de compra. Sobre todo por las opciones entre las que podemos escoger.

Opciones para todos los gustos

Por un lado, contamos con los niveles de acabado Reference, Style, Xcellence y FR. Y no debemos olvidar las variadas opciones mecánicas.

La gama inicial en gasolina contempla el pequeño 1.0 TSI de 115 CV como opción de acceso. En un escalón superior está el 1.5 TSI EVO de 150 CV que incluye sistema de desconexión selectiva de los cilindros. Este último puede pedirse con tracción integral y cambio de doble embrague si se desea.

En diésel la gama arranca con el 1.6 TDI de 115 CV que además es la opción más frugal de todas. Se puede pedir con cambio manual o DSG. Por encima está los 2.0 TDI de 150 CV o 190 CV, con tracción delantera o total y opción con caja DSG.