Poulidor y los otros grandes segundones de la historia del deporte
"Si hubiera ganado un par de veces el Tour no hablarían tanto de mí", afirmaba a Efe en julio pasado Raymond Poulidor, que seguía la carrera francesa por 57 temporada consecutiva y que no daba ningún signo de la fatiga que acabó con su vida este miércoles a los 83 años de edad.
El hombre que más veces pisó el podio de los Campos Elíseos, ocho entre 1962 y 1976, era consciente de que su leyenda residía en el hecho de que nunca subió al escalón más alto, lo que le confirió el aura de un segundón al que las cunetas jalearon por su constancia y su humildad. Un mito del que Poulidor se sentía orgulloso y por el que recordamos a otros grandes segundones de la historia del deporte.
La maldición del Benfica
El Benfica lleva 58 años sin ganar un título debido a la maldición de Bela Guttman. Después de llegar al cuadro portugués para llevarlo a ganar dos Copas de Europas y tres ligas en tres temporadas, no llegaron a un acuerdo para su renovación y lanzó una maldición que hoy en día se sigue cumpliendo: "En cien años desde hoy el Benfica sin mí no ganará un título europeo". Dicho y hecho, por ahora...
Héctor Cúper
El argentino es uno de los entrenador de fútbol con más 'mala' suerte. Ha logrado llevar a sus equipos a diversas finales, pero todas las ha perdido todas. La última con Egipto en la Copa de África, que hizo que en su currículum salga que tiene seis derrotas en seis finales disputadas. Héctor Cúper ha perdido la final de Copa del Rey y de la Recopa con el Mallorca, las dos finales de la Liga de Campeones con el Valencia, la final de la Copa griega con el Aris de Salónica y la citada Copa de África con Egipto.
Stirling Moss
Nadie duda de que es uno de los mejores pilotos de Fórmula 1 de la historia. El punto negro de su trayectoria es que nunca llegó a ganar un Mundial, a pesar de que lo tuvo muy cerca. Fue cuatro veces subcampeón (1955, 1956, 1957 y 1958) y tres veces tercero (1959, 1960 y 1961). Fangio, Brabham y Hill son los que hicieron que Moss nunca levantara el preciado trofeo.
Elgin Baylor
Más triste es aún lo que le pasó a este mítico jugador de los Ángeles Lakers: jugó siete finales de la NBA y ni ganó ninguna. Pero para el colmo de los colmos, se lesionó en la temporada 71-72, justo cuando los Lakers rompieron la hegemonía de los Boston Celtics y se hicieron con el título. Como gesto hacia él, sus compañeros le regalaron un anillo conmemorativo, que terminó subastando.
El Atlético de Madrid y la Champions
La Liga de Campeones es el único trofeo que aún se le resiste en su palmarés al conjunto colchonero. Hasta en tres ocasiones se le ha escapado un título que rozó en las tres finales que disputó: en 1974 contra el Bayern Múnich y en 2014 y 2016 frente al Real Madrid.
Claudio Chiappucci
El ciclista conocido como 'El Diablo' acarició la gloria en los primeros años de los años 90, pero no ganó ninguna de las tres grandes. Uno de sis míticos rivales es el español Miguel Induraín. En el Tour de Francia de 1990 se vio superado por Greg Lemond, en el de 1991 y 1992 por Indurain. Una historia parecida le ocurrió en el Giro de Italia, donde fue segundo en 1991 y 1992 tras Franco Chioccioli e Indurain y en 1993, cuando fue tercero tras Indurain y Ugrumov. La Vuelta a España sólo la corrió dos veces, quedando el 27º y el 11º clasificado.
Randy Mamola
Similar a los casos anteriores, el piloto de motociclismo es el eterno segundón de la ya extinta 500cc (ahora MotoGP). Cuatro veces se quedó a las puertas del campeonato y vio como estos cuatro compañeros le arrebataron su gran sueño: Kenny Roberts (1980), Marco Lucchinelli (1981), Eddie Lawson (1984) y Wayne Gardner (1987).
