Pymes y autónomos denuncian caos e incertidumbre para abrir sus negocios por el retraso del BOE
Las pymes y autónomos agrupados en el colectivo nacional SOS PYMES CORONAVIRUS denuncian el caos en incertidumbre en la que se encuentran por el retraso de la publicación del BOE, previsto para este domingo, y a menos de 24 horas de la reapertura de muchos locales. Un documento clave, ya que es en el que "supuestamente", se especifica quién, cómo, y en qué condiciones pueden o deben abrir las empresas durante la fase 0 de desescalada.
Para las pymes y autónomos, debería haberse publicado el día después del Consejo de Ministros, del pasado martes 28 de abril, en el que se anunció el proceso de transición a la normalidad y la desescalada en una rueda de prensa posterior, ya que esta demora ha provocado que muchas empresas no han tenido tiempo material, ante la falta de instrucciones claras, para la preparación de sus establecimientos en cuanto a protocolos y medidas de seguridad, horarios de apertura, personal laboral, pautas para las citas previas, entre otras actuaciones económicas y sociales.
"Resulta llamativo que 5 días después del anuncio de las diferentes fases que deberían conducirnos a la “nueva normalidad”, bautizada así por el Gobierno de la nación, nos encontramos sin un marco jurídico, sanitario ni laboral que permita abordar con garantías este proceso", denuncian en un comunicado de prensa.
Insisten en que, en estos momentos, los sectores de la economía y el conjunto de la sociedad asiste con perplejidad y confusión a una cuenta atrás en la que el BOE no ha fijado ni definido con la antelación qué requieren y necesitan los pequeños negocios en un situación de extrema excepcionalidad, las pautas mínimas de prevención higiénico-sanitarias para las actividades económicas que van a recuperar su funcionamiento, y con un calendario de reactivación de la actividad económica que carece del soporte jurídico mínimo imprescindible.
Además de esta indefinición, lo que resulta más preocupante para las pymes, para el conjunto de los sectores económicos, y para los trabajadores, es la falta de un modelo de actuación que haga viable la recuperación progresiva de la actividad económica estableciendo ERTEs FLEXIBLES para adaptarlos a la compleja situación económica que vivimos, remarca SOS PYMES CORONAVIRUS.
De hecho, subrayan que la flexibilidad de los expedientes de regulación temporal de empleo, debería establecer un modelo capaz y realista para la incorporación progresiva y gradual de los trabajadores a los puestos de trabajo de forma acorde y armonizada a la debilidad de la situación económica actual y de la capacidad de consumo de los ciudadanos.
En este sentido, y teniendo en cuenta que el Gobierno ya ha estimado una caída del PIB del 9,2% en el año 2020, y una recuperación parcial del 6,8% en 2021, “es inconcebible pretender que las empresas recuperen al 100% de sus plantillas en pocos meses”, comentan desde SOS PYMES CORONAVIRUS.
En este contexto, “es trascendental que el Gobierno entienda y asuma que la actividad económica se enfrenta a una situación desconocida y de total incertidumbre en la que es imposible contemplar la recuperación del 100% de las plantillas en un momento en la que la actividad económica y profesional está sometida a importantes restricciones y limitaciones establecidas por el propio Gobierno, y que van a recuperarse de forma progresiva a lo largo del tiempo en función de como evolucione la epidemia”, sostiene este colectivo.
Solo si se redefinen los ERTEs FLEXIBLES POR FUERZA MAYOR y con una duración mínima hasta final de año, “estaremos en condiciones de plantear la recuperación progresiva de los puestos de trabajo y de la actividad económica acorde con la complejísima situación económica y social actual, donde podamos modificar la plantilla según las necesidades del negocio y la evolución de la economía y el sector”, remarcan.
Se trata, asegura SOS PYMES CORONAVIRUS, de “un reto que hace necesario el acuerdo entre los agentes económicos y sociales y el Gobierno de España de forma perentoria y antes del próximo 11 de mayo, fecha en la que debe de iniciarse la primera fase de recuperación efectiva de la actividad laboral económica y empresarial”, concluye el colectivo.