Las diez cosas que no sabías de Rafa Nadal
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A lo largo de los últimos 15 años la historia del tenis ha tenido en Rafa Nadal a un indiscutible protagonista. Del tenista manacorense se sabe prácticamente todo. Sus golpes más efectivos, sus manías, sus mayores rivalidades, el número de títulos, las más de 1.000 victorias que acumula como profesional y un largo etcétera. Sin embargo, hay muchas curiosidades que apenas se conocen del que sin duda es el mejor deportista español de todos los tiempos. Aquí destacaremos diez de ellas que llamarán la atención.
La cocina. No es que sea su hobbie pero Rafa Nadal no le rehúye a la cocina. De hecho entre sus múltiples amistades y familiares son famosos sus arroces. En concreto, arroz con pescado. En su última entrevista en Telecinco, el balear lo demostró preparándoselo a Bertín Osborne.
Miedos. Asegura que ya no, pero al manacorense le daba pánico la oscuridad. A la hora de dormir siempre tenía que dejar alguna luz encendida. Ahora se limita a encender la televisión o el ordenador. "No sé dormir sin eso", ha reconocido en más de una ocasión.
El jamón. Parece increíble, pero Rafa Nadal no come jamón. El mejor embajador posible de España no suele comer carne ni embutidos, incluido el producto estrella de la gastronomía nacional, el jamón ibérico. Él se lo pierde...
Hobbies. No son pocos. Evidentemente dejamos al margen el tenis. Al manacorense le apasiona el fútbol (es hincha del Real Madrid y accionista del Mallorca), el póker (ha participado en varios torneos benéficos), el buceo y el golf. Hace poco lo vimos practicando con los palos en el campeonato de profesionales de Baleares (quedó sexto).
Gran susto. Precisamente practicando uno de sus hobbies, el buceo, tuvo uno de sus mayores sustos. Fue en Bahamas, donde justo estos días está pasando sus vacaciones. Allí hay muchas islas y la primera vez que fue cruzó en medio de dos de ellas y la corriente se lo llevó sin que nadie se percatara más que él. "Me dejé llevar y me llevó hasta las rocas, no para el océano, lo pasé muy mal", reconoció hace poco.
Los mordiscos. ¿Por qué muerde sus trofeos cuando posa ante las cámaras? Se trata de una tradición sin nada especial detrás. Simplemente se lo pidieron los periodistas gráficos la primera vez que venció en Roland Garros y se convirtió en una costumbre. Y Rafa Nadal es muy de costumbres, sobre todo ganar en París.
En el espacio. Rafa Nadal también viaja por el espacio. Tal y como leen. Aunque más de uno lo ha calificado, gracias a su tenis, como un marciano, lo cierto es que ha dado nombre a un asteroide. Concretamente al número 128.036 según el MPC. Pertenece al cinturón de asteroides que orbita entre Marte y Júpiter y fue descubierto desde el Observatorio Astronómico de Mallorca el 28 de mayo de 2003.
Lugar favorito. Siendo de una isla no podía ser otro que el mar. Es una de las razones que llevan al tenista español a elegir sitios costeros o isleños para pasar sus vacaciones. Y también una de las razones por las que eligió su Manacor natal como residencia habitual.
Futuro. Nadie sabe hasta cuándo estará jugando al tenis (él mismo ha reconocido que pensaba que no jugaría mucho más allá de los 30 años), pero sí tiene claro que cuando cuelgue la raqueta se dedicará íntegramente a su Fundación, con la que lleva ayudando a los más necesitados una década.
Fidelidad. Hay un compañero inseparable de Rafa Nadal desde sus orígenes como tenista. Mejor dicho, una compañera: su raqueta. Esta no ha sido nunca otra que una raqueta Babolat, la marca a la que sigue siendo fiel el actual número dos del mundo.