Kyrgios y la emoción al hablar de su transformación en un año: "He tenido una gran fuerza para continuar"
¡Nick Kyrgios ha vuelto y lo está haciendo a lo grande! El tenista australiano, reciente finalista en Wimbledon, conquistó este domingo el torneo ATP 500 de Washington por segunda vez en su carrera, al imponerse por 6-4 y 6-3 al japonés Yoshihito Nishioka. Esta victoria le permitirá ganar 26 posiciones en el ránking y este lunes es ya el número 37 del mundo.
Kyrgios, tras perder en la hierba londisense ante el serbio Novak Djokovic, no dio opción a Nishioka y le doblegó por cuarta vez en los cuatro enfrentamientos entre ambos. Es su primer título después de tres años y, tal y como se puede ver en el vídeo superior, estaba muy emocionado. Lo ha pasado realmente mal y estar en este momento de su vida y se carrera lo está haciendo ser una persona nueva.
Partizado de Kyrgios
Intratable con el saque, el jugador australiano terminó su torneo con 96 'aces' y castigó a un Nishioka que disputaba la tercera final de su carrera en el circuito profesional, la primera en un torneo ATP 500.
Kyrgios puso cuesta abajo el encuentro al conseguir la rotura en el primer juego y la defendió hasta el 6-4 que le dio ventaja, frente a un Nishioka que tuvo el mérito de no dejar de luchar en ningún momento.
El japonés volvió a perder el saque al comienzo del segundo set y no consiguió recuperarlo frente a un Kyrgios que le sentenció con otro quiebre en el noveno juego, para el definitivo 6-3.
El australiano se coronó tras un torneo intenso, en el que tuvo que superar los octavos y los cuartos de final en el mismo día, el viernes, salvando además cinco bolas de partido contra el estadounidense Frances Tiafoe.
Felicidad absoluta
"Gracias a la ciudad de Washington, amo este sitio, me siento como en casa. Estoy emocionado por estar aquí de vuelta", afirmó Kyrgios durante la ceremonia de premiación.
También bromeó con Nishioka, un jugador con el que tiene un vínculo de amistad desde que tenía catorce años, al desearle "muchas más finales" y expresando el deseo de que el balance entre ambos "siga siendo el mismo".
