El Rio Ave pelea con la FIFA para volver a contar con Miguel Baeza
El Rio Ave quiere contar una temporada más con Miguel Baeza. El centrocampista del Celta de Vigo, por el que se pagaron 2,8 millones de euros por la mitad de sus derechos federativos, no va a entrar en los planes de Rafa Benítez. El cordobés deberá buscar de nuevo un equipo donde tener los minutos que no se ha podido ganar en Balaídos desde su fichaje, en verano de de 2020. En tres temporadas el zurdo de 23 años no ha logrado asentarse en la élite tras formarse en las categorías inferiores del Real Madrid. Para poder contar con el celeste deberá pelear con la FIFA, que ha sancionado a los lusos sin poder inscribir a jugadores hasta enero de 2024.
Desde Portugal señalan el cuadro de Vila do Conde, en las afueras de Oporto, quiere prolongar una temporada más la cesión de Miguel Baeza. Este curso el andaluz tuvo un rol segundario en la Liga Nos con solo 1.084 minutos de juego repartidos en 22 partidos. En ellos solo consiguió un asistencia. Su protagonismo fue de más a menos. En los últimos 13 partidos no participó en cinco y en otros cuatro sus minutos sobre el campos no alcanzaron el cuarto de hora. Aún así en O Jogo indican que el Rio Ave sigue interesado en tener en sus filas a Miguel Baeza en una plantilla que virtualmente esta cerrada con 28 jugadores.
El motivo es que la FIFA ha sancionado al Rio Ave sin poder inscribir a nuevos jugadores hasta el mes de enero. En estos momentos el cuadro portugués ha recurrido esta sanción. La operación solo podrá salir adelante si prospera el recurso interpuesto por el Rio Ave. Mientras tanto el cordobés está trabajando bajo las órdenes de Rafa Benítez. Sabe que sus opciones de quedarse en el Celta son prácticamente nulas.
Miguel Baeza tiene contrato hasta junio de 2025 con el Celta de Vigo. En las tres primeras temporadas de su contrato ha jugado 27 partidos de celeste. En ellos marcó un gol y dio una asistencia. Estuvo media temporada cedido en la Ponferradina, apenas sumó 419 minutos. Este curso pasado, cedido en Portugal, superó los 1.000 minutos en un equipo que terminó duodécimo en la clasificación con 40 puntos.