El Levante Femenino encaja su primera derrota frente al Athletic Club
El Levante UD Femenino encajó este fin de semana su primera derrota de la temporada en la Liga F frente al Athletic Club (1-0). Llegó en la undécima jornada, tras un arranque casi inmaculado de siete victorias y tres empates en 10 capítulos ligueros, frente a un conjunto vasco que bordó su plan de partido y maniató durante mucho tiempo a la formación granota. Tras gozar de buenas oportunidades de adelantarse durante los primeros 45 minutos, las rojiblancas anotaron el único tanto del partido nada más reanudarse el mismo y el equipo valenciano se vio incapaz de anular esa desventaja con un rival que no dejó ninguna grieta por la que colarse.
El Levante Femenino no se encontró del todo cómodo durante el encuentro pero, en la primera mitad, gozó de ocasiones para poder al menos sumar en Lezama. La primera buena oportunidad la gozó Érika tras un centro desde la izquierda de Paula Tomás que despejó mal la zaga local y la asturiana cabeceó rozando el poste. Al poco, la oportunidad más clara: Alba Ferrer ganaba posición dentro del área y chutaba hacia portería y, con la pelota a punto de atravesar la línea de gol, Maddi despejó in extremis. También se rozó el 0-1 en una acción con algunas de las anteriores protagonistas: la albaceteña le ponía el pase de la muerte a Paula Tomás que, eso sí, estorbada por la defensa, aunque con portería para anotar, remató por encima del travesaño. En el otro costado, Nahikari era la que más inquietaba y en una contra en la que se marcó un control en carrera de gran case elevó de forma ligeramente excesiva ante la salida de Holmgren.
El segundo tiempo tomó un cariz diferente, con un Athletic Club más incisivo en ataque, buscando la alegría para su parroquia. Y no tardó mucho en ofrecérsela con una jugada maestra de Nerea Nevado por la izquierda para que Ane Azkona rematase a la red su buen centro. Luego, Silvia Lloris cortó un pase de la muerte de Sanadri hacia Zugasti para evitar el 2-0 e incluso antes hasta Alba Redondo se tuvo que emplear a fondo en defensa para evitar que Landaluze ampliase diferencias. En el ataque levantinista, Andonova gozó de una buena ocasión después ganar posición con el cuerpo dentro el área y, en posición bastante dificultosa, disparó muy cerca de la escuadra izquierda. La escuadra de Sánchez Vera terminó metiendo en su área a las leonas durante toda la recta final del choque pero las anfitrionas se defendieron como felinas para que el triunfo se quedase en territorio rojiblanco.
