Marián Mouriño quiere recuperar la paz social entre el Celta y el Concello de Vigo

Marián Mouriño, nueva presidenta del Celta de Vigo, avanzó que quiere recuperar la paz social con la afición y con todas las instituciones. La máxima responsable del club avanzó que quiere normalizar las relaciones con el Concello de Vigo, rotas desde por la reforma de Balaídos. Tras años de conflictos entre Carlos Mouriño y Abel Caballero se busca tender puentes. "Es importantísimo recuperar la cordialidad y recuperar la relación con todas las instituciones de Galicia", reconoció.

La presidenta del Celta de Vigo expuso los pilares básicos sobre los que quiere construir el mandato que hereda de su padre Carlos Mouriño: "Quiero volver a las raíces, quiero hacer un Celta más competitivo, conectado con la comunidad y con el celtismo y económicamente siga igual de consistente que hasta ahora". Recordó Marián Mouriño que se trabaja en un plan estratégico de tres años que "alineará los objetivos que cada área tenemos que afrontar" para hacer un club "más sólido, grande y competitivo".

Son tres las patas sobre las que quiere asentar este nuevo Celta: "Conexión con la comunidad, la competitividad deportiva y la consistencia económica". La primera de ellas incluye recomponer puentes con el celtismo y sus abonados para que sientan "un Celta cercano". "Tenemos la responsabilidad de dirigir un equipo de fútbol, tenemos la responsabilidad y el privilegio pero el club es de todos", agregó. Además insistió en la necesidad de "recuperar la paz social". Ello incluye reconstruir puentes con instituciones como el Concello de Vigo: "Es importantísimo recuperar la cordialidad y recuperar la relación con todas las instituciones de Galicia, con el Concello, con la Diputación y con la Xunta de Galicia".

"Me encantaría recuperar esa foto en Los Escudos donde todas las instituciones pactaban y apoyaban y se comprometían a apoyar todas al Celta y garantizar un presente y futuro para el Club. Ojalá en mi mandato sea capaz de conseguir que esto suceda", insistió Marián Mouriño. La presidenta recordó la instantánea del año 2017 en el que Abel Caballero, Alberto Núñez Feijóo y Carlos Mouriño firmaron un convenio en el que se pactaba la reforma del estadio de Balaídos. Un pacto que reventó poco después en una cruenta batalla entre el Celta de Vigo y el Concello de Vigo protagonizada por el presidente del club y el alcance de la ciudad.

"T y me gustaría recuperar la normalidad con todas las instituciones. No se trata de borrones y cuenta nueva. Se trata de hacer lo mejor que veamos para el club. A mí me gustaría que el Celta esté en Balaídos y en Vigo muchos años y me gustaría terminar el proyecto de la ciudad deportiva que creo que es clave para el desarrollo de nuestros jugadores y categorías inferiores. Me gustaría estar bien con todos", subrayó la dirigente en su primera rueda de prensa.

La última pata del proyecto es la estabilidad económica: "La prudencia de gestionar y cuidar lo que hoy recibimos: un club saneado, con patrimonio neto positivo, que eso ayuda al límite salarial y pensar en un club a largo plazo, no a corto plazo y persevere la prudencia y consistencia económica para hacer un club de muchos más".