Marián Mouriño encarga a Garcés reforzar la estructura de captación y detección de talento del Celta

El Celta de Vigo abandonó la dirección deportiva tradicional con el fichaje de Luís Campos. Solo han sido unos meses, desde marzo de 2022 a diciembre de 2023, pero el asesor deportivo luso vivió a espaldas de los trabajadores del club celeste. La estructura de captación y seguimiento de jugadores, formada por Mario Bermejo, Santi Castro y Ratkovic, siguió trabajando sin que Luís Campos se interesase en sus informes. En la cantera también hubo bajas como la marcha de Carlos Hugo García Bayón y Alfredo Merino, ahora director deportivo del Mirandés. Tras superar el primer mercado, que se abrirá el 2 de enero, Marco Garcés deberá potenciar y reforzar el organigrama deportivo del Celta de Vigo. Esa es una de las misiones que Marián Mouriño ha encomendado al director deportivo mexicano.

El club, en el comunicado oficial donde se anunció el fichaje de Marco Garcés, apuntó que uno de los objetivos que se marcan en esta nueva etapa: "El área deportiva que liderará el nuevo Director de Fútbol contará con una estructura propia de captación de talento nacional e internacional que reforzará la ya existente, además de un staff multidisciplinar que potenciará el rendimiento y competitividad de los jugadores de todas las categorías del RC Celta".

Marco Garcés fue responsable de captación del Manchester United para la CONCACAF. En Vigo se encontrará con una cantera productiva pero que ha permitido que jugadores de mucho talento del área de Vigo no terminasen en el Celta como Hugo y Guille Bueno, Pedro Fernández, Iker Folgar o Pedro Villar. El objetivo es que el talento que crece alrededor del Celta en equipos como el Val Miñor o el Areosa no termine en clubes como el FC Barcelona, Villarreal, Wolverhampton o Borussia Dortmund.

El grupo de ojeadores del Celta será potenciado dándole a Mario Bermejo, Santi Castro y Ratkovic más medios y personal para que el Celta sea capaz de monitorear más mercados. Potenciar la cantera para que repercuta en el primer equipo es la idea con la que trabajará en Vigo. Así lo apunta el club: "La misión de desarrollar un proyecto de fútbol basado en impeler el desempeño competitivo del primer equipo y sustentado en la cantera, con la idea de impulsar el desarrollo de los jóvenes talentos hasta el primer conjunto celeste".

Luís Campos no colaboró en la captación de jugadores para la cantera del Celta. Esa misión estaba en las manos de Alfredo Merino, antes de su marcha al Mirandés, Álex Otero, Michel Martínez y Edu Covelo. Los tres últimos continúan en el club y deberán coordinarse con Marco Garcés para potenciar los distintos equipos de las categorías inferiores para que estos jóvenes jugadores terminen dando el salto al primer equipo.

Ese será el último paso. Marco Garcés logró que más de una treintena de jugadores de la base terminasen jugando en el primer equipo del Pachuca. El Celta, que mantiene que la cantera sigue siendo el eje fundamental sobre el que se debe sustentar el proyecto, tendrá que lograr que el primer equipo vuelva a nutrirse de jugadores del Celta Fortuna, Gran Peña y Juvenil. Desde Hugo Álvarez, Javi Rodríguez, Gael Alonso, Andrés Antañón o Ángel Arcos.

"Tenemos que creer que se puede, tener la audacia de la esperanza. Los jóvenes de la cantera tienen que creer que pueden llegar al primer equipo y el primer equipo que su lugar es la élite. Nadie debe rendirse nunca", son las primeras palabras de Marco Garcés como director deportivo del Celta de Vigo. Un guiño a A Madroa tras implantar en Los Ángeles FC una estructura en la que reforzó su equipo de ojeadores que monitorizaba un total de 68 ligas.