Riazor se queda sin la visita de la Mareona
Las obras que se están ejecutando en las cubiertas del estadio municipal Abanca-Riazor de A Coruña impedirán a la 'mareona' desplazarse a la ciudad gallega para apoyar al Sporting de Gijón el próximo domingo y empañarán el 'derbi' entre el Deportivo y el equipo asturiano.
Solo los abonados del Deportivo tienen garantizado el acceso al campo y, de los 21.000 con los que cuenta, 8.564 deberán retirar una entrada y ser reubicados en otra localidad.
No habrá entradas a la venta ni por internet ni en las taquillas, si bien el club coruñés sí mantiene abierto el cupo para darse de alta como abonado y poder presenciar el partido.
El Deportivo ha pedido disculpas a sus aficionados por las molestias causadas y también al Sporting de Gijón y sus seguidores por no poder ofrecerles entradas.
La imposibilidad de que se desplace la 'mareona' a Riazor no solo deslucirá el ambiente del partido, una especie de 'derbi' por la proximidad de las ciudades, sino que además generará importantes pérdidas tanto a los hoteles como al resto de los locales de hostelería de la ciudad gallega.
Bergantiños analiza la situación
El centrocampista Álex Bergantiños, que jugó la temporada pasada en el Sporting y en la actual defiende al Deportivo, lamentó que el calendario deparara el enfrentamiento entre los dos equipos justo en el primer partido que se disputará en Riazor esta temporada, si bien indicó que "lo primero es la seguridad de la gente".
"Es una situación un poco excepcional y algo extraño el hecho de que haya zonas vacías en la grada", reconoció el jugador coruñés, quien indicó que el Sporting "desplazaría gente" a Riazor pero la afición blanquiazul, "ganaría igualmente por goleada".
En las obras de Riazor, el Ayuntamiento de A Coruña, propietario de las instalaciones, ha aportado algo más de 6 millones de euros y la Diputación provincial ha puesto 1 millón.
Además, el Deportivo ha invertido 1,7 millones en la iluminación del terreno de juego, que sí estará en condiciones para el partido.
La envergadura de la actuación, que implica la sustitución total de las cubiertas de Preferencia y Tribuna y la rehabilitación de las de los dos fondos, ha alargado los plazos iniciales de la obra ya que los planes previstos en un primer momento pasaban por que la instalación estuviera reformada para el inicio del campeonato.
Consciente de que ya no se iban a cumplir esas previsiones, el Deportivo pidió disputar los tres primeros partidos como visitante, pero ni siquiera eso le ha servido para conseguir que, en su estreno, Riazor pueda ofrecer asiento a los aficionados que no sean abonados del club.
Las reubicaciones de los socios continuarán en el siguiente partido del Deportivo como local y el Ayuntamiento espera que los trabajos concluyan a finales de mes.
