El próximo objetivo de Quique Sánchez Flores es el Sánchez-Pizjuán

Sin prisa, pero sin pausa. Quique Sánchez Flores, técnico del Sevilla, continúa con su idea, como él mismo admitió en sala de prensa en la previa del encuentro ante Las Palmas, de ser "prácticos" ante la delicada situación blanquirroja a pesar de las críticas recibidas por el juego de su equipo. Él distingue el "plan de rescate" del "plan de modelo de juego", cree que aún tiene opciones de dirigir al equipo el próximo año y para ello su próximo objetivo está definido: conquistar el Sánchez-Pizjuán.

El entrenador blanquirrojo, desde que llegase al Sevilla, ha insistido en la importancia de la afición sevillista, en la importancia de dar razones al público para que apoye a los jugadores y es que, desde su óptica, la unión plantilla-afición es difícil de superar.

Los números, sin embargo, no están siendo lo buenos que se esperaban. Mientras que como visitante el equipo solo ha perdido tres citas de las nueve disputadas (cuatro de doce si sumamos la Copa del Rey), como locales han perdido lo mismo... pero en seis partidos.

Lejos de Nervión, el Sevilla solo ha perdido en el Santiago Bernabéu, en el Metropolitano (dos veces, una en la Copa) y en Montilivi, posiblemente en el peor encuentro de la era Quique. Mientras tanto, en el Sánchez-Pizjuán, se ha perdido ante Athletic Club, Alavés y Celta, siendo dos de los tres rivales directos. Además de ello, empató ante Osasuna, por lo que solo suma dos triunfos (Atleti, Real Sociedad), un empate y tres derrotas.

Quique quiere asegurar en el Sánchez-Pizjuán

Es por ello, y teniendo en cuenta que recibirá a Mallorca, Granada y Cádiz, tres de los que están en la zona baja -además del Barça-, Quique Sánchez Flores tiene la obsesión de ganar al menos tres de los cuatro partidos que le quedan en casa. Si también lo hiciese ante los de Xavi, aunque fuese última jornada y no hubiese nada en juego, sumaría un plus.

Él sabe que ganarse a la afición, aún no es tarde, sería un paso importantísimo para estar el próximo año en Sevilla y para ello tiene claro que deben vencer al Mallorca, asegurar prácticamente la salvación, e ir mucho más tranquilos al derbi, cita en la que también se juega mucho.

Si la imagen, y los puntos, mejoran en las próximas tres citas (Mallorca en casa, Betis en el Benito Villamarín y Granada en casa), a principios de mayo se podría estar hablando -otra vez- de un proyecto con Quique Sánchez Flores el próximo año. Todo se remataría con la fiesta definitiva (si se gana, claro está) ante el Cádiz en el Sánchez-Pizjuán.

Distinguir el plan de rescate, en el que aún está sumergido el Sevilla, del plan de modelo de juego, esa es la promesa, y la ilusión, de Quique Sánchez Flores para seguir siendo el líder en el Sánchez-Pizjuán el próximo año. Paso a paso, sin prisa, pero sin pausa.