La despedida de Quique Sánchez Flores del Sevilla: "Ha sido una historia que permanecerá en mi corazón"

Tras la confirmación de su marcha del club por parte de José María del Nido Carrasco, Quique Sánchez Flores ha salido a sala de prensa en la previa del encuentro del Sevilla FC ante el Athletic Club. De forma oficial, este será el último encuentro que dirija el técnico madrileño a domicilio en el banquillo del club hispalense. El entrenador sevillista ha aprovechado para despedirse de todos los miembros de la entidad y la afición.

Las palabras de Quique Sánchez Flores

"Me gustaría decir que en la noche de ayer le comuniqué al presidente que he decidido tomar la decisión de no continuar en el equipo. Es una decisión que está tomada una vez que conseguí el objetivo. Me parecía responsable estar durante una jornada más sin alterar el curso de esta última racha de buenos resultados. En cualquier caso me entristece porque ha sido una historia bonita, dolorosa, que permanecerá en mi corazón para siempre por haber sido una historia llena de emociones", ha confesado Quique Sánchez Flores.

De esta manera ha expresado su forma de ver la situación actual que vive en primera persona tras llegar en invierno para rescatar al equipo en una mala temporada. No ha querido desaprovechar la oportunidad de agradecer a todos los estamentos del club. "Quiero agradecer a los jugadores el esfuerzo por cambiar la dinámica, era una situación muy compleja. Doy las gracias por la comunicación diaria con el presidente y siempre muy clara y muy frontal. Dar las gracias a la dirección deportiva por dejarme venir a ayudar al Sevilla, nos hicimos bien los dos. Darle sobre todo las gracias la afición que ha estado enorme apoyando en los peores momentos, porque cuando parecía que no había una gota de esperanza, ha estado siempre. Yo los he disfrutado al máximo. Siempre he tenido la curiosidad de estar en este estadio con la gente de nuestro lado, le doy las gracias y hasta siempre", ha indicado el técnico.

El adiós del entrenador

La historia de Quique Sánchez Flores tiene fecha de caducidad. Dos partidos y apenas un mes tiene por delante el madrileño antes de su adiós definitivo. La decisión tomada por el entrenador no tiene vuelta atrás. Está más que meditada tras el desgaste que ha sufrido a lo largo de estos meses.