Fernando Alonso, autocrítico con la estrategia de Aston Martin: "Mi apuesta no funcionó"
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Aston Martin parece reconducir la crítica situación, pero aún hay margen
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Fernando Alonso termina octavo; Lance Stroll, séptimo
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Fernando Alonso y Aston Martin parece que están reencontrando las buenas sensaciones. Los últimos Grandes Premios (véase Imola, Mónaco, Montmeló o Spielberg), dejaron un sabor bastante negativo entre toda la cúpula de la escudería británica. Con el recuerdo lejano de un 2023 plagado de podios por parte del piloto asturiano, este curso está recreando los peores resultados de Alonso en la Fórmula 1. Aún así, la confianza es plena. Tanto el piloto como el equipo saben por dónde tienen que ir los tiros para mejorar las prestaciones, y poco a poco lo consiguen. En Silverstone se ha visto una ligera mejoría y ver que los dos coches han puntuado, lo corrobora: Alonso terminó octavo; Lance Stroll, séptimo.
"Las sensaciones fueron buenas, vuelta a la normalidad. Éramos el quinto o sexto coche, Hülkenberg fue muy rápido todo el fin de semana pero pudimos luchar por puntos, séptimo y octavo. Como antes de Imola, volvimos a nuestra posición natural y estoy contento por eso. Después de Austria comprendimos algunas direcciones que quizás no eran correctas y estoy contento por volver a los puntos y sentirme más competitivo. La carrera fue complicada de entender, hubo que apostar en algunos cambios de neumático. Esperé demasiado a poner los intermedios, pero la pista estaba muy seca así que en esas primeras vueltas se habrían dañado mucho y no quería que sucediera en caso de que luego lloviera fuerte, para tener un mejor intermedio. Pero no llovió, así que mi apuesta no funcionó. Necesitas algo de suerte con eso", resume el asturiano en DAZN.
Fernando Alonso, satisfecho en Silverstone
"Teníamos una situación única, los dos coches del equipo estaban separados por un segundo así que tenían que parar en vueltas diferentes. Depende de lo que llueva entre ‘pit-stops’, perdimos una posición pero el resultado para el equipo es el mismo", reconoce el veterano piloto asturiano.
"Tenemos que demostrar, no hablar. Hemos traído muchas piezas, algunas funcionaron y otras no. Espero que en Hungría tengamos una sorpresa positiva. McLaren nos mostró cuánto puede cambiar el rendimiento de un coche en un año y este año tenemos el ejemplo de Mercedes. Una pena estas últimas malas carreras por nuestros propios experimentos", zanja un Alonso que ya tiene la mirada puesta en el próximo Gran Premio en Hungría.