Muere Fernando Puche, expresidente del Málaga CF

Luto en el malaguismo por el fallecimiento de Fernando Puche, presidente del Málaga entre 1997 y 2001, coincidiendo con una de las épocas más importantes del club. El empresario malagueño ha muerto por causas naturales en su domicilio de Torremolinos a los 78 años. La entidad hacía pública la triste noticia a través de sus canales oficiales: "Consternados por la terrible noticia del fallecimiento del presidente Fernando Puche. La familia malaguista se une al terrible dolor de sus familiares y amigos. DEP, presidente".

De accionista se convirtió en dirigente del Málaga sucediendo a Federico Beltrán en la presidencia, en una época donde el propietario del club era el magnate Antonio Asensio. Para muchos es uno de los mejores gestores de la historia del club. Con él al frente, el Málaga pasó del barro de la Segunda División B a Primera, todavía arrastrando los escombros de un desaparecido Club Deportivo Málaga, años antes. Aquel Málaga, ya Club de Fútbol, con Ismael Díaz primero y la firma del 'abuelo' Joaquín Peiró, con quien tenía una relación muy estrecha, quedó para siempre en la memoria. Sergio Pellicer o Basti, ahora en el club, eran jugadores del Málaga en su etapa de presidencia.

"Yo fui un presidente que pasó y el Málaga fue a Primera pero lo hice porque era malaguista y me gustaba el fútbol, no por dinero. Yo jamás cobré un céntimo del Málaga. Jamás", diría en septiembre del año pasado en sus últimas declaraciones públicas, en una entrevista en la Cadena Ser. Malaguista puro, siempre mostró su amor al club y fue accionista hasta la llegada de Al-Thani, que se quedó con su paquete de acciones.

Dimisión y trabas con la justicia

Puche acabó dimitiendo en 2001 "por unos problemas que no tienen nada que ver con el Málaga", afirmó él mismo, cuando estaba inmerso en proceso judicial por presunto fraude fiscal y blanqueo de dinero. De hecho, en noviembre del 2010 fue condenado por la Audiencia Nacional a dos años de prisión y una multa de 33,3 millones de euros como coautor de un delito de contrabando y a indemnizar a la Hacienda Pública junto a otras dos personas con 16,6 millones de euros. Tras su dimisión como presidente del Málaga, fue relevado por Serafín Roldán.

Era provisionista de buques y con su grupo, en colaboración con otros, "idearon la creación y funcionamiento de una red de Almacenes y Depósitos Fiscales" para "procurarse un beneficio ilícito" mediante "la ocultación de numerosas transacciones (contrabando) de tabaco". En el año 2019 fue de nuevo condenado por otro delito de alzamiento de bienes. Tuvo que ingresar dos meses en la prisión  de Alhaurín de la Torre en 2021 por diversos delitos. "No tenía nada de lo que arrepentirme, así que lo tomé como una cosa más de la vida", diría tiempo después.

En su última entrevista aludió a los problemas de corazón que padecía: "Me encuentro bien, aunque con el tema del corazón jodido y las piernas, pero bien". La última vez que se le vio en La Rosaleda fue hace unos meses en el partido Málaga-Ceuta de Primera RFEF, el que conmemoró el 120 aniversario del fútbol malagueño, donde fue uno de los homenajeados por ser partícipe de la historia de la entidad de una manera fundamental. En el acto, Puche recibió una camiseta retro con su nombre, entregada por su amigo Francisco Martín Aguilar. Su nombre estará ligado siempre al club de su tierra. Descanse en paz.